A partir de este 24 de julio comenzó a regir la prohibición para la comercialización y uso del 2,4-Diclorofenoxiácetico (2,4-D) en Argentina por resolución del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).
De esta manera, se cumplió el plazo establecido por el organismo sanitario nacional a través sus resoluciones 466/2019 y 875/2019 (esta última que rectifica la 466). Por lo tanto, este fitosanitario no podrá ser utilizado en ningún establecimiento del país en su formulación “éster butílico e isobutílico”.
Control y fiscalización
Desde este 24 de julio queda totalmente prohibida la importación, elaboración, fraccionamiento, comercialización y uso del ácido 2,4-Diclorofenoxiácetico (2,4-D) en formulaciones de ésteres butílicos e isobutílicos a nivel nacional.
Concretamente, se adoptó esta prohibición a nivel nacional ya que el SENASA considera que existen sustancias activas respecto de las cuales corresponde extremar las medidas para evitar su comercialización y uso, a través de regulaciones y acciones preventivas. Y es el caso puntual del ácido 2,4-Diclorofenoxiácetico (2,4-D).