Periferia

11 de Noviembre de 2020

Por los incendios, se triplicó la contaminación del aire en el centro de Córdoba

La Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) registró altos niveles de dióxido de nitrógeno (NO2). Además, advierten que habrá, contaminación en las aguas los próximos meses.

Tras los incendios, provocados intencionalmente en la provincia de Córdoba para avanzar sobre las zonas de bosques protegidas por ley, comenzaron a conocerse los primeros datos del impacto negativo que tuvieron en el medio ambiente. 

Fue la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE) el organismo científico y tecnológico que ofreció los primeros informes en los que registró que en algunas regiones de Córdoba se triplicó el dióxido de nitrógeno (NO2) en el aire, uno de los principales contaminantes medioambientales. 

La acción deliberada de los productores agropecuarios para avanzar sobre regiones no aptas para la siembra y la actividad económica (debido al potencial ambiental y el impacto positivo para la biodiversidad), así, comenzó tener su correlato en la calidad del aire que respiran los cordobeses. 

Cabe mencionar que, con casi 250 mil hectáreas alcanzadas por el fuego, los incendios en Córdoba representan alrededor del 45% del total de los que se produjeron en 2020 en el país, a lo largo de 14 de las 24 provincias.  

Así lo registró el propio Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), confirmando que la provincia atravesó su peor crisis ambiental de los últimos 20 años, si se compara los siniestros forestales actuales con los registrados en 2003 y 2013, cuando se quemaron 103 mil y 106 mil hectáreas, respectivamente.    

Contaminación del aire 

El registro pertenece al satélite europeo Sentinel-5p, y fue tomado entre el 1 de agosto y el 20 de octubre y confirmaron que las emisiones de los incendios forestales registrados en las sierras cordobesas en los últimos meses impactaron negativamente en la calidad del aire. 

“Se registraron altos niveles de contaminantes en el aire, en comparación con el mismo período del año anterior”, sostuvieron desde la CONAE. Es que, en algunos sitios del centro de la provincia de Córdoba se triplicó la cantidad de dióxido de nitrógeno (NO2). 

Por efecto de los vientos, el humo llegó a pleno centro de la ciudad de Córdoba, donde algunos días se respiró un aire cargado de cenizas y polvo. 

Los datos fueron ofrecidos por la CONAE a UNCiencia, que confirmó que los contaminantes atmosféricos analizados fueron el dióxido de nitrógeno (NO2) y los aerosoles o materiales particulados en suspensión, tales como el hollín, la ceniza y el polvo. 

La información de ambos indicadores fue proporcionada por el satélite Sentinel-5p, de la Agencia Espacial Europea (ESA), que “escanea” toda la altura de la atmósfera, es decir, desde el suelo hasta la altura del satélite (700 kilómetros aproximadamente), señala la nota firmada por Candela Ahumada. 

“Detectamos un nivel de contaminación muy alto en los meses analizados, y una importante degradación de la calidad del aire, como consecuencia de la presencia de diversos aerosoles y de dióxido de nitrógeno a nivel de la tropósfera, la capa de la atmósfera donde se concentran los contaminantes”, explicó Fernanda García, investigadora de la Conae y docente del Instituto de Altos Estudios Espaciales Mario Gulich (Conae-UNC). 

Los datos fueron suministrados por el Centro de Investigación y Transferencia en Ingeniería Química Ambiental (CIQA) (UTN, Facultad Regional Córdoba) y recogidos a través de la estación de monitoreo ubicada en el microcentro de la ciudad de Córdoba. 

Se trata de la única estación homologada en Córdoba que realiza mediciones en superficie, con tomas de muestras hechas a dos metros de altura del suelo, por lo cual resultan muy representativas del aire que respiran las personas. 

Contaminación del agua 

Sin embargo, los impactos en la vida cotidiana no se detienen allí, porque además del INTA y la CONAE, fue el Instituto Nacional del Agua el que, en un informe, advirtió que los incendios en la provincia de Córdoba podrían acarrear la pérdida de calidad del agua. 

Desde el INA, su director, Carlos Catalini, aseguró que el desastre ambiental provocado por la expansión de la frontera agro-ganadera registrará, además, consecuencias sobre el consumo cotidiano, con pérdida en la calidad del agua corriente en los próximos meses.  

Así, las consecuencias que dejaron los incendios forestales, generados para expandir la llamada “frontera agro-ganadera”, generará un impacto casi inmediato en el consumo cotidiano de los centros urbanos.  

“Nuestras cuencas son duras, sobre todo las que abastecen de agua la ciudad y las sierras. El fuego afecta el ciclo hidrológico del ecosistema. Somos una región semiárida y, si llueve con intensidad, tendremos problemas de calidad porque las cenizas se verán reflejadas en la carga orgánica de los cursos”, dijo quien también es docente de la Facultad de Ingeniería Universidad Católica de Córdoba (UCC).  

El efecto no se va a ver mañana o pasado, sino cuando las represas estén colmadas de agua. De aquí a uno o dos meses, veremos el impacto en la calidad del agua”, agregó Catalini. 

¡Sumate a la Comunidad de Periferia!

Periferia Ciencia se sostiene fundamentalmente gracias a una comunidad de lectores que todos los meses, de acuerdo a sus posibilidades, hacen su aporte. ¿Querés que exista un medio como Periferia?