El Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) anunció la creación de una nueva Unidad Ejecutora, por resolución del Directorio del organismo que validó la creación del Instituto de Investigaciones en Producción Sanidad y Ambiente (IIPROSAM).
Las Unidades Ejecutoras son centros de investigación que se manejan coordinados por un director en la realización de tareas de investigación científica, tecnológica o de desarrollo, organizadas en líneas de trabajo.
Se trata de unidades que cuentan con equipamiento adecuado a la índole de la actividad, y se desempeñan en ellas investigadores, técnicos, becarios y administrativos.
La gran mayoría de las Unidades Ejecutoras del CONICET se establecen en asociación con universidades, organismos de ciencia y tecnología, organizaciones de la sociedad y gobiernos provinciales.
En este caso, el IIPROSAM, la Unidad Ejecutora número 300 del CONICET, estará asociado con la Universidad Nacional de Mar del Plata, e integrará el Centro Científico Tecnológico CONICET-MAR DEL PLATA.
El IIPROSAM
El IIPROSAM cuenta actualmente con 64 profesionales provenientes de diferentes áreas de estudio, principalmente: biología, química y agronomía que tienen como principal objetivo investigar sobre el manejo integrado de plagas y su impacto en los sistemas de producción, las enfermedades de importancia sanitaria y el cuidado del medio ambiente. Buscan a partir de la generación de conocimiento básico, aplicado y el desarrollo tecnológico abordar problemáticas regionales, provinciales y nacionales que mejoren la calidad de vida de sus habitantes.
Su director, el investigador independiente del CONICET, Matias Maggi, nombrado por el mismo Directorio en diciembre del 2020, cuenta que esperan consolidarse como una institución académica de excelencia y referencia tanto en el ámbito nacional e internacional, destinada a generar conocimiento y herramientas que promuevan el manejo sustentable y sostenible de los sistemas estudiados a través de actividades de investigación, formación de recursos humanos, transferencia y difusión.
Desde la ciencia básica, los estudios que desarrollan permiten conocer la situación ambiental de los paisajes y ambientes estudiados y la sanidad de los individuos que los habitan, tanto en el pasado como en la actualidad, lo que permite generar información de calidad accesible para quienes llevan a cabo una mejor toma de decisiones.
Maggi explica que si bien el IIPROSAM desarrolla entre sus líneas de investigación ciencia básica y aplicada, considera que la aplicación de estos conocimientos tendrá un impacto directo en la sociedad. Un ejemplo de ello es la investigación que llevan adelante sobre plantas nativas del país y cómo optimizar el rendimiento de cultivos, así como de reaprovechar el descarte de ciertos procesos industriales para generar un menor impacto ambiental de estas actividades.
“Muchas de nuestras líneas de investigación se encuentran orientadas a resolver problemas concretos. Desde el punto de vista productivo, buscamos soluciones para el control de enfermedades que afectan tanto a la salud humana como animal y a la producción agropecuaria”, relata.
Con testimonios de CONICET Mar Del Plata.