El director del Instituto de Energía y Desarrollo Sustentable de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), Daniel Pasquevich, habló sobre las posibilidades que tiene Argentina para el desarrollo del hidrógeno, tras más de cuarenta años de investigación y desarrollos en esa área, contemplando la descarbonización de la economía mundial como uno de los ejes de la política ambiental de muchos países.
Daniel Pasquevich es investigador principal del CONICET y doctor en Ciencias Químicas y coordina el IEDS, desde la ciudad de Bariloche, en Río Negro.
“Durante 2020 hubo una serie de acciones políticas de la Unión Europea que genera una revolución en el mercado energético para los próximos años al introducir y darle más fortaleza a la electromovilidad, y dentro de ella la variante del hidrógeno” dijo Pasquevich, y consideró que ese cambio alcanza a la industria y al uso domiciliario.
Pasquevich precisó que en los próximos años habrá cambios en todo lo referido a descarbonización de la economía, alcanzando las áreas de energía, transporte, industria y consumo social, y consideró que el hidrógeno jugará un papel central en ese cambio.
Precisamente, Argentina investiga hace más de 40 años en esa tecnología, aunque a nivel mundial se iniciaron trabajos ya en los años ’70, y Pasquevich se refirió a ello: “Argentina empezó a investigar en hidrógeno al poco tiempo que se inició en el resto del mundo, porque la Comisión Nacional de Energía Atómica estaba interesada con las aplicaciones en el ámbito nuclear, en la operación de los reactores nucleares”.
“Eso generó una escuela de investigaciones y desarrollos que comenzó a fortalecerse en los años ’80” dijo Pasquevich en diálogo con Gobierno de Científicos y explicó que eso “fue transformando la óptica a nivel mundial”.
Europa anunció que en los próximos 30 años el continente invertirá 460 mil millones de euros en el desarrollo del hidrógeno, y una parte importante se destinará a investigación y para el desarrollo científico-tecnológico.
“La articulación entre el sector productivo y el científico-tecnológico en cuanto al tema hidrógeno es un desafío para nuestro país”, dijo Pasquevich, y sostuvo que “Argentina hoy tiene muchos expertos que están en la CNEA y en otras instituciones y universidades, cómo la Universidad Nacional de Córdoba, La Plata, Buenos Aires y Rio Negro y en empresas privadas pero lo fundamental es la articulación para trasladar el conocimiento al sector empresarial acompañado de un marco normativo desde el Estado”.
Pasquevich aseguró que “una de las fortalezas que tiene Argentina en este tema es que tiene gente trabajando en el exterior con las normas de seguridad y de operaciones”.
El investigador doctorando en Química destacó, sin embargo, el avance en transición energética que realiza hoy la provincia de Río Negro, y afirmó que “Bariloche ha ido generando un polo científico y tecnológico”.
Por último, Pasquevich, aseguró que el desarrollo del hidrógeno se plantea como un objetivo que “es un desafío”.