El Director de Vinculación Tecnológica de la Universidad Nacional del Oeste (UNO), Alberto Briozzo, analizó los pasos que el sistema de ciencia y tecnología deberían dar, según él, para acelerar la generación de divisas, que permitan al país eludir las crisis económicas “cíclicas”, en las que se ve inmerso desde hace más de 60 años.
Su evaluación parte del acuerdo logrado por el gobierno nacional para renegociar la deuda contraída por la gestión de Mauricio Macri, y que comenzará a ser pagada en 2024. “Argentina tiene desafíos importantes como es, en primer lugar, la generación de divisas y el aumento de las exportaciones. Por lo tanto, el foco va a tener que estar puesto en aumentar el nivel de innovación de las empresas para que generen más exportaciones”, aseguró Briozzo.
El ex diputado nacional del Frepaso y del Partido Justicialista consideró que “El gobierno logró resolver un tema clave para la Argentina como es la deuda que le había dejado el anterior gobierno que prácticamente impedía cualquier acción de gobierno presente y futuro”.
Para Briozzo, “si bien se va a confirmar el 24 de agosto el nivel de aceptación, ya con los datos que tenemos se plantea un horizonte muy interesante para la Argentina. Nos va a dar por lo menos cuatro o cinco años de respiro”.
“Este es el gran tema de la Argentina de los últimos 60 años. El famoso péndulo: por cada punto que crece la Argentina aumentan un 3% las importaciones. En un momento se llega a un cuello de botella donde no nos alcanzan las divisas”, explicó Briozzo, quien es integrante de la Comisión de Innovación, Ciencia y Tecnología del Instituto Cafiero.
“Si lo vemos históricamente, el primer Plan Quinquenal de Perón era un plan de desarrollo, de producción y llegó un momento en el ’51 o ’52 que no había divisas para sustentar lo que venía. De allí en adelante esto se fue repitiendo y el gran desafío que tiene Argentina hacia adelante es poner la estructura productiva en marcha, pero generando un plan de desarrollo que empiece a resolver estos problemas: la competitividad de las pymes, el nivel de exportaciones y la generación de divisas”, evaluó el especialista en vinculación tecnológica.
En diálogo con el programa Gobierno de Científicos, por Radio Caput, Briozzo consideró que “es el desafío de la década, y el modo en que se está resolviendo el tema de la deuda genera las condiciones que podrían hacer esto posible”.
Briozzo, explicó que en 2014-2015, entre el 16 y 17% de las pymes argentinas (no las grandes empresas) eran innovadoras, y que había un 25% que estaba en ese camino. Pero, además, consideró que la innovación “no es solamente crear el iPad. La Innovación es de productos, de procesos, de comercialización”.
Para el autor de la Ley Nacional del Software del 2004, “en la Argentina, como todos los países en desarrollo, es mayor la inversión que hace el Estado pero siempre se necesita una mayor inversión del sector privado como ocurre en los países más desarrollados”.
“Lo que se hace en I+D desde las pymes es mucho mayor. En Argentina las pymes tienen un perfil bajo porque les cae encima el Estado Nacional, provincial y municipal, más la AFIP y les cuesta mucho estar en blanco. Por sus características muchas veces tratan de tener un perfil bajo y de esconder”, evaluó Briozzo.
Por eso consideró que “hay una inversión oculta, que no se ve, y la única forma de visualizarla es ir a las empresas y recorrerlas”.
La Red de Adecuación Ambiental
Desde la coordinación de la Red de Adecuación Ambiental de la Cuenca Matanza-Riachuelo, Alberto Briozzo, actualizó su trayectoria ligada a la vinculación tecnológica.
La RAAC es una red de adecuación ambiental que está conformada por instituciones, cámaras empresarias, universidades, ONG’S y organismos de investigación que tienen el objetivo de lograr la adecuación ambiental de unas 800, de las 5000 empresas existentes en la vera de la cuenca Matanza-Riachuelo.
“La creación de esta Red busca llegar a las empresas desde otro lugar donde vinculadores muy bien formados desde el punto de vista ambiental y de la gestión puedan ayudar a las empresas a realizar su adecuación ambiental”, explicó Briozzo.
Para ello, el ex diputado nacional, explicó que “Lo que se va a empezar a hacer desde el punto de vista presencial, cuando podamos hacerlo, es que una red de vinculadores tecnológicos que provengan de cámaras empresarias, universidades y demás llegue a las empresas, que puedan hacerle un relevamiento, un diagnóstico y vean qué es lo que necesita desde le punto de vista de la adecuación ambiental”.
Por su parte, tanto desde el Estado Nacional como desde ACUMAR va a tener una ayuda a través de subsidios o créditos blandos para que realice esa adecuación tecnológica, explicó Briozzo.
“Este es un trabajo que hacemos desde varias universidades y esperamos al momento en el que podamos salir al territorio para ayudarles que hacer la adecuación ambiental”.
“Llegar con vinculadores al territorio va a permitir que muchas empresas que nunca han revivido nada del Estado y que están en el territorio permitan la posibilidad de la adecuación ambiental”, explicó Briozzo y agregó que “armar un aparato de comunicación y la existencia de vinculadores que accedan a las empresas desde el territorio a través de relaciones de proximidad, son ambas importantes”.
