Un grupo de diputados de Unidad Ciudadana presentó un proyecto de ley para declarar de “interés estratégico” la industria del litio, con un articulado que fija una cuota de producción para destinar al consumo interno y un precio más barato que su cotización para exportación.
La iniciativa lleva la firma de Julia Strada, Mario Manrique, Carlos Castagneto, Pablo Carro, Blanca Osuna, Cecilia Moreau, Leila Chaher, Leopoldo Moreau y Sabrina Selva, entre otros. Según medios nacionales, la iniciativa generó malestar entre los gobernadores de las provincias litíferas.
El proyecto establece la creación de “una cuota especial de compuestos y derivados de litio para su comercialización en el mercado interno”, mientras que en otro establece una “obligación de venta” para que “las empresas productoras de compuestos y derivados de litio destinen una porción de su producción a su comercialización en el mercado interno a los fines de promover su industrialización y agregado de valor”.
Industrializar el litio, a contramano del RIGI
En declaraciones al medio Ancasti, de Catamarca, la diputada nacional Julia Strada se refirió al espíritu de la iniciativa: “La cuota significa que una parte, que en el proyecto llega solo al 15% de lo que se extrae y se procesa luego como carbonato de litio, que es la primera fase en la producción, se pueda vender en Argentina a un precio preferencial para que se le agregue valor“, indicó al precisar que se apunta a que una proporción del material se industrialice en Argentina.
“Lo que nosotros decimos, sin hacer mella, sin perjudicar el proceso exportador, porque se sigue exportando, mayormente el carbonato de litio, que pueda una parte destinarse al agregado de valor para que la Argentina tenga participación en la cadena de valor del litio, tener industria y no ser solamente exportadores del material primario y que podamos, eventualmente, poder tener sector automotriz con autos híbridos”, manifestó.
La iniciativa tiene un espíritu contrario a lo que define el Régimen de Grandes Inversiones (RIGI), que el Congreso le aprobó al gobierno de Javier Milei, que apunta a desregular la normativa para las grandes mineras internacionales, fijando cuotas de aporte al mercado local muy bajas.
“Finalmente la discusión es ¿queremos ser un país industrial o no queremos ser un país industrial? Yo en eso soy tajante y que hablen claro los que votaron el RIGI: ¿Qué quieren para la Argentina? ¿Quieren que la Argentina agregue valor, genere más puestos de trabajo?”, se preguntó.
“Somos defensores de que Argentina no sea sencillamente una plataforma de exportación del mineral primario”, sostuvo y se refirió a la propuesta para crear el Instituto del litio.
“Según el proyecto, las provincias que deciden son las provincias litíferas, las provincias que manejan la cuota para industrializar el litio son las provincias litíferas que se beneficiarían con una fábrica de agregado de valor porque está pensado para que la fabricación se haga allí (por Catamarca), y no en Buenos Aires, sino en las provincias litíferas”, comentó. En este sentido argumento que la iniciativa respeta el federalismo, ya que el directorio estará conformado por representantes de las provincias. “Las provincias son las que deciden la localización de las plantas, son las que toman decisiones sobre la cadena de valor porque el proyecto es de carácter federal y a nosotros nos interesa que la Argentina pueda insertarse de manera inteligente”.
Exportación
Otro de los puntos del proyecto es el de los derechos de exportación. Las retenciones, serán del 10 por ciento como máximo para compuestos de litio y sus derivados, 4 por ciento para materiales activos que contengan litio y 0 por ciento para celdas de batería.
Finalmente, la iniciativa elimina el tope a las regalías y permite que las provincias que adhieran a la ley podrán aplicarlas en función del precio internacional del litio.
Seguí leyendo:
En agosto se lanza “Atómico 3”, la primera criptomoneda respaldada por el litio
