Durante un encuentro del Programa de Estudios sobre Energía Nuclear e Innovación (PROGENI) de la Universidad Nacional de Tres de Febrero (UNTreF), el diplomático argentino encargado de la dirección general del Organismo Internacional de Energía Atómica (OEIA), Rafael Grossi, se refirió a los alcances en salud y desarrollo económico sustentable de la energía atómica, a nivel mundial.
Grossi fue invitado por la UNTreF, a través del PROGENI, que forma parte del Centro Interdisciplinario de Estudios Avanzados (CIEA) de la casa de altos estudios, y allí se refirió, primero al programa Medidas Integradas contra las Enfermedades Zoonóticas (ZODIAC) de la OIEA, creado en el contexto de la pandemia de coronavirus para prevenir futuras zoonosis que podrían desencadenar una nueva crisis sanitaria global.
“Cuando estalló la pandemia, convoque a todos los equipos técnicos y les pedí que se armara un proyecto integral de todas las capacidades que el OIEA podía poner a disposición de los Estados miembros para estar mejor preparados”, contó Grossi.
Como explicó, actualmente el organismo está consagrado a activar una red de más de 300 laboratorios veterinarios en todo el mundo. “Estamos trabajando muy duro para darles equipamiento y generar plataformas informáticas de comunicación rápida y alerta temprana de hallazgos e identificación de patógenos que puedan ser relevantes en la investigación de posibles nuevas zoonosis”, dijo, agregando que en esta iniciativa los acompaña la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OIE).
Además, recordó que desde el organismo asistieron a muchos países cuando irrumpió la covid-19. “Este año con la pandemia lanzamos la campaña de asistencia más importante en la historia del organismo, ayudando a 126 países. Hemos enviado RT-PCR para diagnóstico, estamos dando entrenamientos, mandamos tests y equipos de protección”, señaló.
Consolidación de la energía nuclear en la matriz energética
Otro de los aspectos que abordó en su exposición fue el crecimiento que viene teniendo la energía nuclear en varios países y su revalorización a raíz de los debates sobre el calentamiento global.
“Lo que estamos viendo es una consolidación del lugar de la energía nuclear en la matriz energética de muchos países. Hoy vemos una revalorización en la medida en que es una energía de carga inmediata y de enorme sustentabilidad y confiabilidad”, expresó.
Grossi indicó que además de los países que ya tienen una tradición en esta fuente energética hay varios que están empezando a desarrollarla, como son los casos de China e India. “Son economías muy carbonodependientes que están apostando muy fuerte a lo nuclear. Es tal el desafío que tiene en cuanto a la reducción del aporte de energía fósil, que no existen muchas fuentes de energía que sean capaces de colmar esta brecha tan rápidamente como la energía nuclear”, explicó, graficando que en China hay 17 centrales en funcionamiento y otras tantas en construcción, y que hoy cerca del 10% de su energía es de origen nuclear.
También mencionó el caso de los países del golfo arábigo, entre ellos Emiratos Árabes Unidos y Arabia Saudita. “Hablar de centrales nucleares en países del Golfo resulta prácticamente contradictorio frente a la imagen que uno puede tener de que están nadando en petróleo y flotando en gas. Uno se pregunta qué hacen construyendo centrales nucleares. Y sin embargo lo están haciendo por razones que tienen que ver con la posibilidad de preservar sus fuentes de exportación de petróleo, con reducir los combustibles fósiles y con la desalinización del agua que usan con los reactores nucleares”, argumentó.
Grossi expuso que en este momento la energía nuclear aporta a nivel global entre un 12 y 15% de toda la energía que se produce y que además genera un tercio de toda la energía limpia que hay en el mundo. Otra cuestión que destacó es la gravitación que tiene en las economías más desarrolladas, como Francia, en donde el 80% de su electricidad es alimentada por reactores nucleares, y Canadá o Estados Unidos, en donde la energía nuclear representa el 20% de su matriz energética.
“Estoy haciendo un esfuerzo importante porque el OIEA y, a través nuestro, la energía nuclear esté presente en los foros del cambio climático, cosa que era tabú hasta hace poco tiempo. La energía nuclear no era bienvenida, se la consideraba como una energía sin futuro, una tecnología vieja, una cantidad de clichés que no tienen nada que ver con este mundo real que les estoy describiendo ahora, donde la energía nuclear empieza a aparecer como una alternativa interesante”, resumió.
Los reactores modulares pequeños: ¿en el horizonte próximo?
Por último, habló de los desarrollos nucleares del futuro y se detuvo en los reactores medianos y pequeños (SMR). “Existe una tendencia bastante marcada de hacer reactores con una capacidad de potencia de 100 y 150 megas, más accesibles desde el punto de vista financiero y de una gran ubicuidad, en particular en espacios geográficos alejados de los grandes centros económicos”, afirmó.
Entre ellos, se refirió al proyecto del reactor modular argentino CAREM. “No somos los únicos, hay 70 proyectos de reactores medianos y pequeños. La gran ventaja que tenemos nosotros es que gracias a la gestión de varios gobiernos esto se está haciendo, se puede tocar, se ve, está ahí el CAREM”, agregó.
Grossi apuntó que este tipo de reactores son los que más van a demandar los países en el futuro. “Ahí hay un mercado, una demanda. Hay que terminarlo, ponerlo a andar, demostrar que se lo puede hacer. Argentina tiene un nicho interesante y ha demostrado en el caso de los reactores de investigación sencillos que pudo ser competitiva y ganar licitaciones en todos lados. Los reactores medianos y pequeños son una vía tecnología muy interesante para el país”, concluyó.
Lo acompañaron en la transmisión con preguntas y comentarios el rector de la UNTREF, Aníbal Jozami; el Secretario de Investigación y Desarrollo y director del CIEA, Pablo Jacovkis; el director de PROGENI, Julián Gadano; y los periodistas Natasha Niebieskikwiat, Nora Bär y Leandro Darío.
Anteriormente, PROGENI organizó un seminario internacional abierto a todo el público con destacados especialistas en la temática, que abordaron aspectos como las soluciones de la energía nuclear al cambio climático, los procesos de innovación asociados a ella y cómo lograr las licencias sociales para su desarrollo. Participaron de esa propuesta el director de la Agencia de Energía Nuclear de la OCDE, William Magwood; el jefe de la Sección de Estudios Económicos y Planificación del Organismo Internacional de Energía Atómica, Henri Paillere; la directora de la División de Energía Nuclear en Recursos Naturales de Canadá, Diane Cameron; la directora de Relaciones con Stakeholders en el Centro de Impacto Energético de Washington DC, Michelle Brechtelsbauer; la manager del Departamento de Sistemas Integrados del Laboratorio Nacional de Idaho, Shannon Bragg-Sitton; el vicepresidente de China Zhongyuan Engineering Corporation, Ding Jian; y la Chairwoman de International Framework for Nuclear Energy Cooperation, Suzanne Jaworoswki, entre otros.
Fuente: UNTreF.