Periferia

19 de Agosto de 2020

Brasil presentó un dispositivo que captura muestras del nuevo coronavirus en el aire

La tecnología fue desarrollada entre graduados de la Universidad Nacional de Sao Paulo y la Facultad de Medicina de la USP, para monitorear la seguridad de ambientes con alta concentración de personas.

Un grupo de graduados de la Universidad Nacional de Sao Paulo (USP), junto al Hospital de Clínicas de la Facultad de Medicina de esa casa de altos estudios, desarrollaron un dispositivo tecnológico que captura muestras del nuevo coronavirus, en el aire.  

El desarrollo, se logró mediante una colaboración entre la startup Omni-electronica y el Hospital das Clínicas (HC) y permite capturar muestras aéreas del nuevo coronavirus “para monitorear la seguridad de ambientes con una alta concentración de personas”.  

Según los investigadores, el sistema será útil para reanudar las actividades económicas que fueron duramente afectadas por la expansión de la pandemia, a lo largo de todo el territorio.  

La compañía cuenta con el apoyo del Programa de Investigación Innovadora para Pequeñas Empresas(PIPE) de FAPESP (Fundación de Amparo a la Investigación de Sao Paulo).  

La empresa, Omni-electronica, fundada por graduados de la Escuela Politécnica (Poli-USP), ya había desarrollado el sistema SPIRI, que integra diferentes sensores para monitorear la calidad del aire en interiores y, ahora, también puede detectar SARS-COV-2. 

“Tenemos una base de datos muy robusta sobre la calidad del aire interior, sabemos cómo se transmiten los virus respiratorios y cómo se intensifican las infecciones en los meses de invierno. Cuando comenzó la pandemia del nuevo coronavirus, nos quedó muy claro que la propagación interna era el escenario más probable, aunque todavía no se hablaba mucho, ni siquiera de la Organización Mundial de la Salud (OMS)”, dice Arthur Aikawa, CEO de Omni-electronica y coordinador del estudio. 

La compañía ofrece SPIRI, un servicio de monitoreo de la calidad del aire, a través de una suscripción. Un dispositivo in situ con múltiples sensores incorporados envía la información a la planta, lo que genera informes en línea en tiempo real. Los técnicos pueden entonces instruir al cliente sobre la mejor manera de aumentar la circulación de aire cuando no es adecuado. 

Muestras de aire 

Durante dos meses, el grupo de investigadores realizó diferentes muestreos de aire en el Hospital das Clínicas, con dos, seis y ocho horas. El equipo utilizó, acoplado al sistema SPIRI, un colector que tenía, entre otros componentes, una membrana filtrante de politetrafluoroetileno (PTFE), capaz de retener unidades de virus. 

La membrana fue enviada a un laboratorio asociado, que realizó pruebas de PCR (que identifica el ARN viral) en tiempo real, lo mismo que las muestras recogidas de la cavidad nasofaríngea de pacientes sospechosos de haber sido infectados. 

Incluso en entornos con una alta incidencia de bioaerosoles, como aquellos en los que se realizan traqueotomía e intubación, los investigadores sólo fueron capaces de capturar el virus en muestras durante ocho horas. El equipo también incluyó investigadores del Instituto Central de HC-FM-USP Alessandro Wasum Mariani, Renato Astorino Filho y Paulo Henrique Peitl Gregório. 

“El complejo HC es antiguo, con ventanas en todos los entornos. A pesar de que es un lugar con una alta incidencia del virus, la ventilación adecuada significa que no permanece en el aire tanto tiempo”, dice Aikawa, que tiene como socios en la empresa Matheus Manini y John Esquiagola, quienes también colaboraron en la investigación.  

Indicadores de riesgo 

Los resultados del estudio se están preparando para su publicación en una revista científica. Además, la compañía desarrolló un protocolo aún más completo para el seguimiento de la calidad del aire. 

Este protocolo inicial por sí solo ya puede garantizar una circulación adecuada del aire y prevenir la concentración de virus respiratorios en el medio ambiente. Ahora, también es posible hacer pruebas regulares para detectar si hubo circulación del nuevo coronavirus. 

“Las pruebas Sars CoV-2 en este protocolo son posibles, pero difíciles de hacer a gran escala por razones de tiempo y costo. Sólo faltan cinco días para que el laboratorio dé los resultados. El SPIRI por sí solo, sin embargo, es un indicador en tiempo real para saber si se están tomando las precauciones necesarias para hacer que el medio ambiente sea menos propicio para la transmisión de virus”, dice el empresario. 

Aikawa cree que la integración de spiri en los virus de monitoreo de aire desde lugares estratégicos como estaciones de tren y metro puede contribuir a un retorno más seguro a las actividades económicas. Sobre la base de pruebas de hc, los investigadores crearon indicadores capaces de señalar diferentes grados de riesgo de contaminación de acuerdo con lo que se detecta. 

Fuente: FAPESP. 

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