Científicos del INTA Concordia y las universidades de Entre Ríos y La Plata presentaron avances de estudios sobre una microalga del río Uruguay capaz de descontaminar efluentes que contienen pesticidas y productos farmacéuticos, en un Congreso Latinoamericano en Foz do Iguazú.
Investigadores del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), sede Concordia, presentaron tres investigaciones en el Congreso Latinoamericano de Residuos de Pesticidas que se realizó esta semana en, Foz do Iguazú, Brasil.
Junto con otras instituciones entrerrianas participaron del “Latin American Pesticide Residue Workshop 2019” (Laprw 2019) en Foz Do Iguazú, Brasil, junto con investigadores de la Unión Europea y América.
Investigación para descontaminar ríos y efluentes
La primera presentación fue sobre contaminantes emergentes, con un equipo de investigadores del Laboratorio de análisis de metales de la Universidad Nacional de Entre Ríos (UNER), y del Laboratorio de Pesticidas del INTA Concordia.
Los profesionales estudiaron la capacidad de una microalga aislada del río Uruguay para descontaminar los efluentes que contienen pesticidas, así como productos farmacéuticos.
El trabajo fue seleccionado por el comité científico del congreso para su exposición oral, y la becaria de Conicet Mariana Jimenez Veuthey realizó la disertación.
La conclusión destacó que mediante procesos biotecnológicos “sencillos y recursos naturales existentes en la región se pueden descontaminar efluentes generados por el hombre, y así reducir el impacto negativo sobre los recursos acuíferos”.
La contaminación en vegetales
El segundo trabajo presentado fue “Monitoring of pesticide residues in or on fruits and vegetables”, basado en monitorear residuos de “pesticidas” en frutas y hortalizas de Concordia.
Fue realizado por estudiantes de la especialización en Ingeniería Ambiental Universidad Técnica Nacional, el INTA Concordia y el Centro de Investigaciones en Medioambiente de la Universidad Nacional de La Plata.
Los resultados constituyen “el primer relevamiento realizado en la región e intentan describir la situación actual” sobre esta problemática, indicaron desde el INTA.
El glifosato, hasta en la lluvia
Semanas atrás investigadores de la Facultad de Exactas de la Universidad de La Plata (UNLP) identificaron que los residuos del Glifosato, en diferentes concentraciones, se halla presente en el agua de lluvia, el algodón, gasas, peces, lagunas bonaerenses, alimentos y en el ambiente en general.
El Glifosato es un herbicida con potencial carcinogénico (cáncer), muy utilizado en las plantaciones a gran escala, en la pampa húmeda bonaerense, desarrollado para la eliminación de hierbas y de arbustos.
Los argentinos tenemos una exposición continua y sostenida a este compuesto y a otros tantos plaguicidas. Existen relevamientos en niños en zonas fumigadas donde se ha demostrado el daño genético respecto a un grupo control, el que ha sido asociado con la exposición a plaguicidas.
Particularmente, el glifosato ha sido asociado a “Linfoma no Hodgkin”, en aplicadores en Estados Unidos.
Damián Marino, científico del Centro de Investigaciones del Medioambiente (CIM), un organismo de doble dependencia UNLP-Conicet, remarcó: “el glifosato es una molécula muy pequeña que tiene la función de ser un herbicida generalista porque no discrimina, sino que mata todo aquello que sea verde a excepción de un organismo genéticamente modificado como la soja, el maíz o el algodón”.
Con el tiempo, algunas especies después de 20 años del uso de este compuesto comenzaron a hacerse resistentes, motivo por el cual debió aumentarse la cantidad del químico por hectárea”.
Según Marino, “en los últimos 10 años entraron más de 1000 millones de litros de glifosato. Este número pone a la Argentina en el primer puesto a nivel mundial en la cantidad de uso de plaguicidas por habitante por año (10 litros de plaguicidas por habitante por año)”.