Científicos de Bahía Blanca, del Grupo de Investigación en Multifísica Aplicada (GIMAP) del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) desarrollaron un importante prototipo que aprovecha la vibración de los motores para crear energía eléctrica.
El dispositivo permite ahorrar energía en vehículos tradicionales y mejorar la autonomía de baterías en autos híbridos.
El desarrollo tiene como fin aprovechar la vibración de los motores para convertirla en energía eléctrica, adosando el dispositivo al block o soporte del motor.
Dicho dispositivo electromecánico multimodal consiste en una viga de acero inoxidable y una lámina de material piezoeléctrico con dos sistemas masa-resorte en sus extremos.
La deformación del piezoeléctrico ocasionada por la vibración genera una corriente entre los electrodos del mismo, la cual pasa por un circuito acondicionador para entregarla a los sensores o batería del vehículo.
El desarrollo que tiene como referentes a Mariano Febbo, investigador independiente del CONICET, físico y Dr. En Ciencia y Tecnología de los Materiales, Sebastián Machado, investigador independiente del CONICET y Dr. en Ingeniería y Claudio Gatti, becario doctoral del CONICET e Ingeniero Mecánico.
El avance podría aplicarse en los denominados “vehículos híbridos”, es decir en aquellos cuyo motor depende dispone de varios motores eléctricos para funcionar.
El impacto del desarrollo podría introducirse en la industria automotriz que viene desarrollándose en países como Chile, Ecuador, Colombia, México y Costa Rica, los países que más apuestan a este desarrollo.
Hoy, por ejemplo, Costa Rica cuenta con un parque automotor de 600 vehículos eléctricos.
El mayor impedimento para su desarrollo es que se requieren inversiones estatales fuertes y planificadas en el sector energético, tanto nuclear como hidroeléctrico y de energías alternativas.
Argentina no cumple el Acuerdo de París
Un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) reveló que Argentina es uno de los países con menos avances estructurales para el avance de los automóviles eléctricos.
El país figura entre los países de la región con menores avances en materia de promoción a la electromovilidad.
El estudio afirma que la electromovilidad “representa una gran oportunidad para los países de América Latina, donde la energía proviene de fuentes significativamente menos contaminantes que en algunos países desarrollados”.
Así el país no definió acciones de mitigación que respeten el Acuerdo de París, a diferencia de Bahamas, Barbados, Bolivia, Brasil, Costa Rica, Chile, Ecuador, Surinam, Uruguay y Venezuela.
La Argentina, según el estudio, aplica una normativa adecuada sobre las emisiones de los vehículos livianos y tiene “en desarrollo” el etiquetado sobre eficiencia energética.
Sin embargo a diferencia de Chile, Brasil, Costa Rica, Ecuador y Uruguay no presenta avances en tres aspectos referidos a la “estandarización e inter operabilidad”.
Estos son: el funcionamiento de vehículos eléctricos; la infraestructura de carga; y la comunicación vehículo-red.
Los avances implican que exista una política energética clara con objetivos dirigidos al consumo interno y al abaratamiento de costos.
Sin embargo en los últimos discursos del presidente Macri para el sector no se definieron avances claros al respecto.
Impacto tecnológico
Para el caso de los vehículos con motores de combustión interna, el dispositivo supone una reducción en el consumo de combustible liberando menos gases contaminantes al medio ambiente en un mismo período de tiempo.
En el caso de los vehículos eléctricos e híbridos, implica una mejora en la autonomía de las baterías.
En cuanto al carácter multidisciplinario del desarrollo, Gatti, expresa que: “El dispositivo en sí es electromecánico con evidente vínculo entre ambas disciplinas”
“Desde el punto de vista del desarrollo mecánico, la condición resonante del dispositivo para diferentes velocidades del vehículo es una de las características sobresalientes”, aseguró Gatti.
