Luego del posicionamiento de la provincia de Salta sobre el litio y la posibilidad de declararlo “estratégico”, algo similar a lo que hizo Argentina con el petróleo a principios del siglo XX y que derivó en la creación de YPF, Jujuy se opuso a la nacionalización del mineral.
La respuesta devino de los borradores del posible proyecto de ley que elabora el kirchnerismo para nacionalizar el litio, un mineral sobre el que Argentina tiene una de las principales reservas del mundo y que abre el camino a inversiones millonarias.
Las tres provincias que conforman la Mesa del Litio son Salta, Jujuy y Catamarca, desde donde ya aclaran que los recursos son provinciales y que la iniciativa sería inconstitucional.
Sin embargo, fue el gobernador Raúl Jalil, de Catamarca, el que se mostró cercano a la posibilidad de que el Estado Nacional defina el control y la administración de un recurso del cual se busca generar potencial productivo, científico y tecnológico para todo el país.
Los tres distritos ya han suscripto acuerdos para avanzar en conjunto con incentivos a las empresas que quieran radicarse en la región, con probabilidades de cerrar desembolsos solo este año por u$s470 millones. Inclusive, diez días atrás el salteño Gustavo Sáenz, el jujeño Gerardo Morales y el catamarqueño Raúl Jalil acordaron remitir a las respectivas legislaturas sendos proyectos de ley para ofrecer los mismos beneficios y preferencias a todos los emprendimientos de servicios mineros radicados en las tres provincias.
Los gobernadores esperan que los proyectos de los diputados nacionales Marcelo Koenig y Carlos Heller y de la legisladora jujeña, Carolina Moisés, no alcancen estado parlamentario, en momentos en que el litio acelera su demanda por la expansión de los autos eléctricos que utilizan ese recursos para sus baterías (ya pusieron un pie en el desarrollo del litio argentino automotrices como Toyota y BMW), y que para 2030 podría generar más de u$s2.000 millones en exportaciones para el país.
La alternativa a la nacionalización del mineral, algo que hizo Chile y Bolivia, es la extracción del mineral crudo y su exportación sin industrializar su obtención y comercialización.
Esta opción es cortoplacista y permite obtener divisas de manera inmediata, pero no genera impacto en el desarrollo productivo, científico y tecnológico local, como lo haría el control nacional de los recursos naturales.
La posición es defendida por las tres provincias del norte y por el Consejo Federal Minero (COFEMIN) que ya tomó postura en contra de declararlo “estratégico”.
Las provincias del norte no quieren valor agregado
Por lo pronto, en las provincias reaccionaron de forma preventiva y salieron a reclamar con el argumento del federalismo ante la posibilidad de que avance la iniciativa. El ministro de Producción de Salta, Martín de los Ríos, mencionó a Ámbito.com que “las tres provincias involucradas conformaron la Mesa del Litio, entendiendo de que se trata de un recurso provincial”.
El funcionario de Sáenz alertó que “tal como lo establece el artículo 124 de la Constitución, corresponde a las provincias el dominio originario de los recursos naturales existentes en su territorio”. De los Ríos también advirtió sobre el impacto de un proyecto sobre nacionalización del litio. “En Salta entendemos que estas iniciativas generan inestabilidad para los inversionistas”, dijo a este medio.
El Gobierno salteño así fijó postura como también lo hizo el jujeño, desde donde remarcaron la “inconstitucionalidad” de un proyecto de nacionalización del litio. “Ese tipo de proyecto va en contra a lo constitucional porque se meten en el dominio natural que tenemos la provincia sobre los recursos. Nosotros en Jujuy estamos trabajando bien y nos compete a nosotros tomar esas decisiones”, dijo el secretario de Minería e Hidrocarburos de Jujuy, Miguel Soler, al medio local TodoJujuy.
El funcionario del radical Morales alertó sobre la inestabilidad para las inversiones y agregó que el Gobierno nacional ya forma parte de la Mesa del Litio junto a las tres provincias norteñas.
Tanto en Salta como en Jujuy aclararon que esperan tener acceso a ese proyecto, ya que hasta ahora no participaron los gobiernos provinciales en la elaboración de los borradores. Antes, ya se habían presentado dos proyectos. En noviembre de 2020 el diputado nacional por Salta Lucas Godoy presentó su iniciativa para declarar al litio un recurso estratégico nacional y crear una empresa estatal. Otro proyecto en la misma línea fue elevado por el senador nacional por Jujuy Guillermo Snopek.
Por su parte, en Catamarca (que de acuerdo lo que revelado la semana pasada por la empresa canadiense Neo Lithium Corp tiene una de las reservas más importantes del mundo) no se ha expresado al respecto ningún funcionario del gobernador Jalil.
En paralelo, ayer Morales firmó un memorándum con la empresa china Ganfeng Lithium para instalar una fábrica de baterías de litio, en un intento para que el valor agregado industrial se desarrolle también en el país. Ganfeng lleva adelante en Jujuy un proyecto por el que espera extraer 40 mil toneladas de litio en 2022 y ya genera unos mil puestos de trabajo solo con la obra civil, además de desarrollo de proveedores locales. De la rúbrica del acuerdo también participó el ministro de Desarrollo Productivo nacional, Matías Kulfas.
En el sector empresario también hubo rechazo a un posible proyecto. El presidente de la Cámara Argentina de Empresarios Mineros (CAEM), Alberto Carlocchia, por un lado celebró ayer el anuncio de YPF sobre la creación de una empresa para el desarrollo del litio. “Pero en contraposición a esta noticia que podría ser positiva, han surgido también voces que de confirmarse propondrían una estatización del litio”, dijo el dirigente empresario. “Este tipo de noticias generan incertidumbre y dudas en los inversores y pueden hacer que el país pierda su ventana de oportunidad”, dijo el presidente de CAEM.