La primera planta nacional de desarrollo tecnológico de celdas y baterías de ion litio “entraría en funcionamiento antes de 2023”, para lo cual ya fue encargado el equipamiento que deberá llegar en los próximos meses al país, para avanzar en el proyecto que desarrollan el Conicet, la empresa Y-TEC y la Universidad Nacional de La Plata, en cuyo predio se avanza en la construcción de la obra civil.
El presidente de la Universidad platense, Fernando Tauber, indicó que ya se concretó la compra del equipamiento que se espera que arribe al país durante el último cuatrimestre del año; a la vez que se trabaja en la posibilidad de garantizar el autoabastecimiento para las materias primas que insumirá la planta, que busca promover el desarrollo y utilización de energías limpias en la región.
Anuncio desde el INIFTA
Tauber realizó este anuncio en el Instituto de Investigaciones Fisicoquímicas Teóricas y Aplicadas (INIFTA), durante el lanzamiento del curso de formación para operarios de planta de producción de celdas de ion Li.
Allí adelantó que, si se cumplen los plazos previstos para la entrega de los equipos, la fábrica entraría en funcionamiento antes de 2023.
“Esta fábrica es una clara muestra que la agenda científica tecnológica de la UNLP está a la vanguardia del desarrollo nacional y de la agenda social de nuestro país. Por otro lado, este curso para operarios demuestra la importancia de la formación de recursos humanos en la Escuela Universitaria de Oficios, al servicio de los desarrollos académicos y avances científicos productivos”, aseguró Tauber.
“La agenda científica tecnológica de la UNLP está a la vanguardia del desarrollo nacional”
Fernando Tauber, presidente de la UNLP.
El curso de operarios está destinado a la formación de un conjunto de técnicos ya seleccionados sobre aquellos estudiantes que previamente recibieron una formación como operadores de planta de manufactura industrial en la Escuela de Oficios de la UNLP, parte de los cuales serán los primeros operarios de la planta de desarrollo de tecnología de celdas de ion litio.
Una planta en la UNLP
La planta de desarrollo para la fabricación de celdas y baterías de ion litio estará emplazada en el Centro de Innovación y Transferencia Tecnológica, ubicado en diagonal 113 entre 64 y 66, de La Plata, un predio que reúne viejos galpones de la ex Obras Sanitarias, y que la Universidad viene remodelando para concentrar distintas iniciativas tecnológicas y de producción.
Félix Requejo, director científico de la planta y director del INIFTA, explicó que “la planta constituye la primera experiencia de tecnología cien por ciento nacional para la fabricación de celdas de ion litio en Argentina”.
“Hace tiempo que se comienzan a advertir anuncios sobre el desarrollo de diversas iniciativas para la fabricación de baterías de litio en el país orientadas a múltiples aplicaciones. En todos los casos, se trata del ensamblado de celdas importadas para la confección de esas baterías”, detalló.
“La planta constituye la primera experiencia de tecnología cien por ciento nacional para la fabricación de celdas de ion litio en Argentina”
Félix Requejo, director del INIFTA (CONICET).
Kow How
Requejo destacó que “este proyecto, en cambio, se enfoca en la fabricación misma de las celdas, escalando el “know how” alcanzado desde sus aspectos básicos -como la síntesis de los materiales activos empleados para los electrodos de las celdas- para instalar una tecnología propia para la fabricación de celdas. De esta manera se elimina la importación de las mismas para generar un producto de alto valor agregado donde interviene el recurso natural del litio”.
El director del INIFTA explicó que “el funcionamiento de la fábrica demandará materias primas disponibles en el norte del país, por lo que se espera que esta integración y desarrollo facilite y promueva el emplazamiento de nuevas plantas en diferentes regiones del territorio, con las dimensiones particulares que defina cada demanda”.
En el mismo sentido, sostuvo que “el empleo de recursos propios optimizará los costos asociados a la materia prima, haciendo más competitivo al producto”.
Este mismo esquema de integración a nivel nacional podrá ser aplicable con países vecinos como Bolivia o Chile, que también disponen de los recursos naturales, pero carecen hoy de un desarrollo tecnológico propio para la confección de celdas, destacó el investigador.