El físico e investigador del CONICET Diego Hurtado cuestionó duramente la intención del Gobierno argentino de privatizar Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA), calificándola como un “escándalo de entrega de recursos” al capital financiero global. Hurtado, que también fue vicepresidente de la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), subrayó que la compañía estatal es un “activo estratégico” para el desarrollo tecnológico y económico del país.
Nucleoeléctrica administra las tres centrales nucleares argentinas, Atucha I, Atucha II y Embalse, y, según destacó el especialista en declaraciones a Radio Splendid, es un sector “superavitario” con un valioso acervo científico y humano que incluso exporta “tecnología de punta nuclear”. Para ilustrar su postura, recurrió a una metáfora futbolística: “equipo que gana no se toca”.
El Gobierno argentino oficializó el inicio de la privatización parcial de Nucleoeléctrica Argentina S.A. (NASA) (que opera las centrales nucleares del país) a través de la Resolución 1751/2025.
El plan para privatizar Nucleoeléctrica
Esta medida contempla la venta del 44% del paquete accionario a capital privado mediante una licitación pública, mientras que el Estado conservará el 51% del control estratégico. El 5% restante del capital se destinará a un programa de propiedad participada para los trabajadores.
Hurtado consideró que la iniciativa de privatizar NASA es “demencial”, ya que se trata de una actividad rentable que fortalece la independencia científica del país. “Desarrollamos ciencia, somos más independientes, no produce gastos, somos superavitarios y sin embargo la quieren privatizar”, criticó.
El investigador trazó un paralelismo histórico y sostuvo que la ofensiva privatizadora actual remite a los procesos de desmantelamiento de los años 90. Aseguró que esta orientación está “codificada” en la Ley Bases, donde originalmente se preveía privatizar el 100% de la empresa. Según sus palabras, el acuerdo que impulsa el Ejecutivo será estudiado “en los próximos 100 o 150 años, como hoy hablamos del Pacto Roca-Runciman”.
El ministro Caputo en la mira
Hurtado apuntó además a los actores involucrados y vinculó la avanzada privatizadora con los intereses del poder financiero internacional. Señaló al ministro Luis Caputo como “representante de los fondos buitres” y afirmó que estos grupos, interesados en “negocios rápidos, saqueo y depredación de los recursos naturales”, también poseen participación en la explotación del litio argentino.
A pesar de sus críticas, el investigador transmitió cierta esperanza basada en la trayectoria del país. Recordó que el sector nuclear ya había sido desmantelado y volvió a ponerse en marcha a partir de 2003 mediante decisión política e inversión pública, lo que permitió que Argentina vuelva a exportar tecnología nuclear.
Con esa perspectiva, Hurtado se mostró convencido de que el sector podrá recuperarse nuevamente. “Lo vamos a recuperar”, afirmó, llamando a frenar una dinámica que, según considera, conduce a la entrega de la riqueza nacional.