El secretario de Articulación Científico Tecnológica del Ministerio de Ciencia de la Nación, Juan Pablo Paz, aseguró que el actual gobierno revirtió el “desbalance” en la distribución de fondos para el área, en comparación con las cifras históricas en la relación entre las provincias del centro del país y la des del NEA-NOA y la Patagonia. Paz recordó que del 80 al 85% se destinaba a la zona central del país.
Por lo que históricamente los más beneficiados fueron investigadores, laboratorios e institutos del área metropolitana de Buenos Aires y de las provincias de Santa Fe y Córdoba.
A partir del programa vigente desde 2021, Equipar y Construir Ciencia, y los Programas Federales la misma región recibió un 35 a 40% de los recursos del el Ministerio de Innovación, Ciencia y Tecnología. Mientras que para NOA, NEA y Patagonia la tendencia fue en ascenso. Además Equipar Ciencia contribuyó a tener un mapa y ver lo que está haciendo cada institución.
Federalización, en foco
El secretario nacional recordó que en el Mincyt lo habitual era que investigadores individuales o grupos de investigación presentaran propuestas. Hoy la lógica es otra. “Cambiamos eso y las propuestas son formuladas por las instituciones. Entonces podemos recibir un pedido de lo que quiere comprar la Universidad Nacional del Nordeste, o el INTI o la Uncaus”, ejemplificó desde la provincia de Chaco.
Por otra parte la historia del sistema científico siempre tuvo procesos de pérdida de valor de la moneda. Viendo esa situación el Ministerio de Ciencia y Tecnología garantizó el pago con fondos adicionales.
“En este momento se está comprando la primera tanda (de equipos) y a medida que las instituciones avanzan en el proceso, cuando se aproxima el momento de abonar, se actualizan los fondos”, describió.
A través de una resolución adicional se asignan montos extra y se cubre el valor. De otra manera no se podría comprar lo que se pidió originalmente.
Decisión política
Paz destaca una decisión política que permitió avanzar con la importación de equipamiento científico que en dos convocatorias suman más de cien millones de dólares para todo el país. “Así se cambió la lógica en la distribución de recursos”, dice. En cuanto a la elección de equipos e insumos aseguró que se respeta el orden de prioridades que presenta cada institución.
Cada una la transmite al Ministerio, después se analiza la capacidad para ejecutar cada proyecto o si cuentan con recursos humanos suficientes para desarrollar lo que piden.
“Nosotros no comparamos ni elegimos entre proyectos de una misma propuesta. Por ejemplo: considerar que el tercero amerita ser primero es algo que no nos corresponde. Respetamos la prioridad que define cada institución”, remarcó.
Testimonios: Diario Norte (Chaco).
