Con fondos de la Agencia Santafesina de Ciencia y Tecnología y asesoramiento de la Universidad Nacional de Rosario y el Polo Tecnológico de Rosario, TECSO, una empresa de base tecnológica rosarina, diseñó un prototipo de base de carga para drones, un desarrollo con impacto en robótica.
La empresa de base tecnológica de la ciudad de Rosario, en Santa Fe, anunció que desde su área de Investigación, Desarrollo e Innovación (I+D+i), un equipo especializado en drones y robótica, llevó a cabo el diseño y fabricación de un prototipo de base de carga autónoma para drones.
Se trata de la primera etapa de otros relacionados a inspecciones autónomas con drones. Desde TECSO, manifestaron que aspiran a fabricar a nivel industrial la base autónoma. El objetivo del innovador desarrollo rosarino es independizar al dron de la intervención humana. El impacto, en principio va directamente asociado al sector agroindustrial en el proceso de digitalización y agricultura de precisión de las cosechas. En principio, los drones sirven para controlar las grandes extensiones de tierra, por ejemplo en el registro de malezas. De hecho, Santa Fe, de hecho, es una de las provincias que más apuesta financiera realiza a la tecnificación del sector agropecuario.
De cualquier forma, el desarrollo tiene impacto potencial en otras áreas productivas.
Aporte publico-privado
El proyecto inició en 2019 y cuenta con el asesoramiento del Polo Tecnológico de Rosario y con financiamiento de la Agencia Santafesina de Ciencia, Tecnología e Innovación (ASaCTeI), más la inversión de la propia compañía cooperativa. Además, recibe colaboración de servicios de la Fundación CIDETER (una entidad que financia el desarrollo tecnológico de pymes asociadas cuyo impacto llegué al sector agroindustrial).
Además, la iniciativa tuvo asesoramiento del Laboratorio de Electrónica de Potencia, y el Laboratorio de Automatización y Control, ambos pertenecientes a la Universidad Nacional de Rosario (UNR), que colaboraron en el desarrollo de los módulos de carga y potencia.
TECSO
Tecso, la Fundación Cideter y la Universidad Nacional de Rosario (UNR) avanzaron así con la innovadora base de carga y reabastecimiento autónoma para drones, lo que brindaría a estos aparatos una gran independencia de la intervención humana.
“Hasta ahora los drones funcionan hasta que se quedan sin batería y entonces aterrizan porque requieren de una intervención humana y manual para continuar”, señaló Ignacio Sanseovich, presidente del Polo Tecnológico de Rosario. “La idea es cambiar eso y automatizarlo”, aseguraba al inicio del proyecto, en diálogo con el portal Ecos365.
Sanseovich es Ingeniero en Sistemas de Información, egresado de la Universidad Tecnológica Nacional de Rosario y presidente del Polo Tecnológico de Rosario. Antes, presidió TECSO, la empresa gestionada de forma cooperativa, dedicada al diseño y desarrollo software y tecnología (hoy a cargo de Cristian Taibbi). El Polo Tec Rosario es una asociación civil con más de 100 empresas socias de diferentes rubros: software, tecnología, comunicaciones y bio-tecnologia.
De allí que en 2019 presentaron un proyecto conjunto con las entidades ya mencionadas con el fin de crear una base de carga autónoma. “De esta manera, cuando el dron llega a cierto nivel de batería, se puede posar ahí y por contacto recargarse, tal como ocurre hoy con algunos celulares que lo hacen por inducción y no por cuestión mecánica”, graficó.
Ventajas
Entre las ventajas de este desarrollo se encuentran el evitar la acción manual y humana, y la adecuación a condiciones climáticas adversas. “Buscamos elaborar las bases con materiales resistentes al clima, con una tapa para recubrir todo mecanismo de carga, y adaptada a todo tipo de drones”, destacó.
Se trata de una iniciativa en principio experimental, que ya cosechó el aval del Ministerio de Producción, Ciencia y Tecnología santafesino. “Estas lineas de financiamiento sirven para que las empresas se animen a avanzar con iniciativas que tienen su componente de riesgo y un costo en horas de investigación, pero que apuntan a una solución tecnológica y sustentable”, manifestó Sanseovich.
Escala con fines comerciales
Inicialmente se enfocarán en realizar un prototipo, que en caso de que funcione adecuadamente, se producirá en escala con fines comercializables. “Así hemos hecho con la producción de drones, que comenzaron como prototipo y luego se transformaron en un área de la empresa y con servicios asociados a eso”, apuntó.
Inicialmente estas bases están pensadas para el mercado local, ya que exportar hardware tiene algunas complicaciones añadidas respecto a hacerlo con software. Sin embargo tampoco lo descartan a futuro. “Tenemos una fuerte presencia en Colombia y allí las soluciones vinculadas a drones tienen una muy buena recepción, por lo que estas bases de recarga también podrían pensarse para ese mercado”, consideró el referente de Tecso.
