El economista brasileño Ilan Goldfajn asumirá la presidencia del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) con la misión de apuntalar el organismo multilateral y devolverle el título del principal banco de desarrollo de la región, y en cuya gestión la Argentina tendrá una alta participación.
Entre las áreas claves que están pendientes de su asunción se encuentra Ciencia y Tecnología, que depende en gran medida del financiamiento del BID, para sus programas y objetivos.
La concreción de varios de los ejes de la política científica de hecho tienen que ver con los fondos que provienen del BID.
Si bien la asunción formal se concretó en Washington, recién a mediados de enero próximo será la presentación pública de esta nueva etapa del BID, tras la conflictiva salida de Mauricio Claver Carone. El BID aprueba crédito de US$1.140 millones para integrar proyectos de energía renovable
Contexto
El brasileño llegó a la conducción de organismo multilateral en un contexto de inflación mundial enrarecido por la prolongación de la guerra de Ucrania, y luego del escándalo que protagonizó Claver Carone, que fue destituido en septiembre pasado luego de haberse comprobado que favoreció a una empleada a su cargo, con la que además mantuvo una relación sentimental.
En una entrevista realizada antes de que se oficializará su designación, Goldfajn dijo que entre sus prioridades está la de trabajar de forma “transparente” y apuntalar la imagen del organismo, ya que “el BID tiene que volver a ser la institución más importante de América Latina”, tanto por la capacidad en recursos como en liderazgo.
Hasta el mes pasado, Goldfajn se desempeñó como director del Departamento para el Hemisferio Occidental del Fondo Monetario Internacional (FMI) y se involucró con la Argentina en la aprobación del acuerdo de facilidades extendidas, y en las dos primeras revisiones para el desembolso de los fondos aprobados.
Goldfajn
El flamante titular del BID fue también presidente del Banco Central de Brasil durante el gobierno de Michel Temer y se formó como economista en la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ), con una maestría en la Pontificia Universidad Católica (PUC) de esa misma ciudad y un doctorado en el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT).
Por otro lado, para la Argentina, se estrena también una gestión promisoria, ya que la economista Cecilia Todesca Bocco representará a la Argentina en la vicepresidencia de Sectores y Conocimiento, en la Gerencia de Infraestructura y Energía y en el nuevo Instituto de Género e Igualdad.
Se trata de áreas consideradas clave por el Gobierno argentino. El BID anunció un fondo de apoyo a empresas de base tecnológica de Latinoamérica
Según adelantó Todesca Bocco, el tema de género será uno de los nuevos ejes de gestión del BID y fue uno de los “temas estratégicos” que presentó la Argentina para la postulación de candidatos.
Gasoducto
En este sentido el futuro gasoducto con el que la Argentina abastecerá a Brasil es un potencial proyecto de interés mutuo para ambos países, algo que para el organismo multilateral puede ser también de tamañana relevancia.
En su momento, desde la embajada argentina en EEUU, que conduce Jorge Argüello, señalaron que el país “participará de la conducción del nuevo BID con dos puestos claves que manejan el 40% del presupuesto”.
En la elección del nuevo titular del BID el voto de Estados Unidos, el apoyo de la Argentina y de Brasil fueron decisivos para Goldfjan, ya que entre los tres países reúnen casi el 53% del poder de voto en la entidad.
Cambio climático
La Argentina tiene una cartera de préstamos con el organismo que supera los 13.000 millones de dólares.
Días atrás, el Directorio BID aprobó una operación de préstamo por 500 millones de dólares vinculada a objetivos de mitigación y adaptación a los impactos del cambio climático.
Este financiamiento ya fue girado por el organismo a mediados de diciembre y pasó a fortalecer las reservas internacionales del Banco Central.
En cuanto a la estrategia bilateral 2021-2023, la misma se estructura en “cuatro pilares estratégicos: reducción de la pobreza y protección social a los sectores más vulnerables; recuperación económica y desarrollo productivo 4.0; estabilidad macroeconómica y eficacia de las políticas públicas; y transformación digital como eje transversal del desarrollo”, según reza el documento de planificación para los próximos años.
