El Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación trabaja en el borrador de dos proyectos de modificación de regímenes vigentes que hará ingresar este año en el Congreso. Uno de esos proyectos, incluso, está en la agenda de tratamiento de las sesiones extraordinarias que tratarán los legisladores este mismo mes de febrero. Se trata de proyectos apuntados para incentivar la inversión privada en investigación y desarrollo.
Las iniciativas apuntan a diseñar herramientas que incentiven al sector privado a invertir en investigación y desarrollo. En un encuentro que mantuvo el ministro de la cartera, Daniel Filmus, con la Cámara Argentina de Biotecnología (CAB), el jueves pasado Peirano describió los proyectos como “pilares de gestión”.
El primero de los proyectos es el del diseño de reforma del Régimen de “Compre Argentino”, al que, desde la Agencia Nacional de Promoción de la Investigación, el Desarrollo Tecnológico y la Innovación (Agencia I+D+i), propondrá crear la figura legal de las compras públicas para innovación.
Las compras públicas para innovación
Esto fue propuesto como una categoría nueva dentro del orden jurídico del Estado. “Esto permite que se prioricen compras que puedan apoyarse en la ciencia y la tecnología”, explicó Fernando Peirano, presidente de la Agencia I+D+i, a Periferia.
Con este instrumento el área buscará fomentar la innovación desde la demanda del sector público con la participación de organismos públicos y privados en el marco del Plan de Innovación Federal.
El año pasado, el encuentro contó con la participación del Banco Interamericano de Desarrollo (BID), el Ministerio de Economía de Brasil y las empresas tecnológicas argentinas Jet Oil Technology y Chemtest. Desde la cartera entienden que se trata de un instrumento diseñado para alentar y acercar la tecnología al Estado.
Para el mes próximo, el FONARSEC impulsará un llamado con financiamiento del BID para compras públicas que fortalezcan los vínculos entre el Estado y las empresas innovadoras.
“Podemos complementar la promoción de ciencia y tecnología basada en la oferta con otra basada en la demanda de bienes y servicios científicos y tecnológicos por parte del Estado”, afirmó Fernando Peirano, al respecto.
La idea es que ministerios y organismos del Estado establezcan una demanda de productos o servicios que hoy no existen pero que pueden desarrollarse a partir de la capacidad científico-tecnológica del país.
“Sumamos a favor de la innovación una herramienta potente que es la capacidad del Estado a través de las compras públicas”.
Fernando Peirano
Los beneficios
La acción jurídica pretende aprovechar el poder de compra del Estado para constituir esos productos y servicios dándole prioridad en los concursos a aquellos postulantes que demuestren la incorporación de conocimiento en el proceso.
“La otra consecuencia importante de tener esta figura es que en muchos acuerdos internacionales hoy se le otorga a los países en desarrollo una reserva de mercado asociada a poder priorizar a proveedores nacionales cuando se trata de comprar nuevos productos o productos ligados a innovaciones que pueden tener impacto en mejorar los servicios públicos y todas las herramientas que el Estado necesita para llevar adelante sus políticas”, explicó Fernando Peirano.
Estás prácticas ya están en uso en otros países del continente latinoamericano y de Europa, así como en Estados Unidos, y operan a partir de la identificación de una demanda precisa, disparando procesos públicos y privados de inversión en ciencia y tecnología.
El proyecto de “Compre Argentino” está siendo consensuado con el Ministerio de Desarrollo Productivo, que encabeza Matías Kulfas e ingresó en la lista de las iniciativas que serán tratadas en pocos días en sesiones extraordinarias en el Congreso. Se trata de una modificación al régimen vigente.
Proyecto de Crédito Fiscal
Otra de las normas en la que trabaja el Ministerio de Ciencia y Tecnología es la restitución del crédito fiscal para las empresas que realicen Investigación y Desarrollo y que había sido limitado durante el gobierno de Cambiemos.
Desde la cartera explicaron que con este proyecto buscan “generar nuevas líneas de financiamiento y apoyo a las empresas”. Entre los ejes de la propuesta está la promoción de las exportaciones de tecnología, el beneficio de cargas impositivas, la formación en tecnología de recursos humanos, tender puentes con las universidades argentinas y los centros de investigación para las empresas que instrumenten el uso intensivo del conocimiento.
Pero, otra de las puntas centrales del proyecto es darle protagonismo a las PyMEs innovadoras, permitiendo que accedan a beneficios fiscales.
La Pesada herencia del macrismo
Para eso, a través de la Agencia I+D+i plantearon una contrarreforma a la ley de reforma tributaria aprobada en 2017 en el Congreso, durante la gestión de Mauricio Macri.
“Con esa reforma se desorganizaron los criterios y pautas para que las empresas accedan a un crédito fiscal”, afirmó Peirano en diálogo con Periferia, apuntando a la gestión del macrismo.
“Esos regimenes quedaron muy restrictivos por decisión del macrismo, por eso queremos ampliarlos y reorientarlos” le dijo Peirano a este medio.
Los criterios los fija el Congreso en un cupo de 2 mil millones de pesos anuales. “Queremos reestablecer esa posibilidad que hoy no está vigente” dijo el funcionario.
Peirano explicó que la voluntad del ministerio es plantear una reforma que estimule favorablemente a las pequeñas y medianas industrias (PyMEs).
Desde la Agencia que preside Peirano proponen que en su primera solicitud una PyME obtenga hasta el 80% de la inversión de I+D en crédito fiscal.
Es que el crédito fiscal ofrece condiciones de devolución considerablemente más accesibles que las de un crédito a tasa de mercado.
“Esto va a permitir que las ganancias que obtenga la PyME en estos momentos de recuperación de la industria vayan a alimentar un nuevo ciclo de inversión en tecnología y desarrollo de innovaciones en el ámbito de su actividad”, sostuvo Peirano.
Filmus: “Biotecnología es una de las tres áreas de mayor financiamiento”
Además confirmó que para las empresas grandes buscarán elevar el porcentaje hasta el 50% y plantearán la creación de cupos sectoriales y regionales. La medida apunta a revitalizar actividades económicas o regiones con empresas con potencial destacado de crecimiento y de inversión en I+D.
La impronta parlamentaria de la gestión
El proyecto de crédito fiscal será ingresado en el Congreso pero todavía sin fecha precisa.
La idea de Daniel Filmus es sumarlo a una batería de iniciativas legislativas en las que el ministerio busca apoyarse para fortalecer los lineamientos de la política científica de la actual gestión.
Cabe recordar que el actual titular de la cartera tiene un perfil marcadamente ligado al Parlamento, en dónde intervino como legislador, y su gestión al frente del ministerio contempla al Poder Legislativo como un espacio para consolidar medidas para el área de ciencia y técnica.
“Para la Agencia estas acciones legislativas son una muy buena manera de complementar el menú de instrumentos de carácter económico financiero que solemos administrar, y a los cuales le hemos sumado algunas acciones institucionales y de formación como toda la línea que estamos desplegando asociada a las agencias provinciales de innovación y la constitución de un sistema de promoción mucho más federal”.
Fernando Peirano
“Tenemos la mirada puesta en tender un puente entre la ciencia y la producción por eso hay que alentar a los grupos científicos pero también al grupo de pymes innovadoras que están del otro lado del puente” y puso como ejemplo el caso de los barbijos Atom Protect.