La Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP) dio a conocer los resultados de la medición correspondiente al tercer trimestre de 2025 del índice de transparencia de organismos públicos, y el dato sobresaliente es que cuatro universidades nacionales aparecen entre las diez primeras más transparentes, según el informe que elabora el propio estado nacional.
El índice de la AAIP fue creado para monitorear el cumplimiento de las obligaciones de transparencia de los organismos del sector público nacional. Para ello, los funcionarios y técnicos de la Agencia elaboran sus datos en base a la revisión de los sitios web de 198 entidades, según las obligaciones de la Ley 27.275 – art.32.
La medición resulta de un informe de cómo cada organismo expone la información interna sobre uso de recursos públicos, convenios, acuerdos, gestión y/o resultados de gestión.
Concretamente, este apartado de la Ley que regula el Acceso a la Información Pública establece que “la información debe publicarse de manera clara, estructurada y entendible”. Además, la normativa busca que se eliminen las barreras que impidan que terceros reutilicen la información.
Las universidades, al tope de la transparencia
La Universidad Nacional de Córdoba (UNC), de hecho, es el organismo público más transparente de todo el ranking, en lo que hace al acceso a la información pública.
Justamente la supuesta falta de acceso a los datos de cómo se gestionan las universidades es el argumento central del gobierno de Javier Milei para justificar el brutal ajuste sobre las casas de estudios superiores.
Pues bien, en el informe, que elabora una agencia estatal, cuatro de las 70 universidades nacionales aparecen entre las primeras diez más transparentes, a contramano de lo que sucede con las carteras que dependen del Poder Ejecutivo Nacional como la propia Jefatura de Gabinete de Ministros que conduce Manuel Adorni, que aparece en el puesto 67 de los 200 organismos medidos.
Seguí el informe completo: https://portal.transparencia.gob.ar/transparencia/medicionTransparencia
El Gobierno, con índices bajos de transparencia
Las cuatro universidades señaladas entre las primeras del ranking son la Universidad Nacional de Córdoba (UNC), la Universidad Nacional de Mar del Plata (UNMdP), la Universidad Nacional de San Martín (UNSaM) y la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) con desempeños sobresalientes en 96,5 puntos sobre 100.
Así, las universidades vuelven a aparecer en el tercer trimestre del año entre las instituciones más consistentes y confiables del país en materia de transparencia activa.
El índice elaborado por la AAIP, tiene a las universidades entre las que mejoran su propio desempeño trimestre a trimestre, demostrando un trabajo sistemático y profesional de la Dirección de Ética y Transparencia Pública, dependiente de la Secretaría de Asuntos Jurídicos y Legales, junto a las áreas técnicas responsables de los portales institucionales.
Algo bastante alejado de lo que el gobierno de Javier Milei y sus funcionarios de la Secretaría de Políticas Universitarias afirman.
El impacto del puntaje queda aún más claro al observar la posición relativa frente a organismos nacionales de alta jerarquía institucional, superando a entes como el Ministerio de Economía (puesto 24), a la Sindicatura General de la Nación (puesto 28) y a otras entidades de máxima relevancia federal como la Jefatura de Gabinete de Ministros (puesto 67).
Cómo funciona el índice de transparencia
Las universidades, al ser organismos públicos, están obligadas por ley a garantizar el acceso a la información pública a toda persona que la solicite, sin necesidad de justificar el motivo. Para ello, la mayoría cuenta con un portal de transparencia donde publican información activamente y ofrecen mecanismos para solicitar información que no está publicada, de manera gratuita. En Argentina, esto está regulado por la Ley N° 27.275, y la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP) es el órgano garante.
¿Cómo funciona?
Cualquier persona puede solicitar información pública de forma gratuita, a menos que la reproducción o envío de la información genere un costo mínimo. La persona que solicita la información no debe acreditar interés ni justificar el uso de la información solicitada.
Las universidades tienen un plazo de 15 días hábiles para responder, con la posibilidad de una prórroga de otros 15 días si se necesita más tiempo para recopilar la información. Si no se obtiene respuesta, se puede presentar un reclamo ante la Agencia de Acceso a la Información Pública (AAIP).
El índice mide además la transparencia activa y reactiva: es decir si la universidad o cualquier otro organismo publican información de manera proactiva en su portal de transparencia (ej. presupuesto, contrataciones, etc.) o si entrega información que fue solicitada específicamente por una persona.
La información que se puede solicitar puede ser sobre el funcionamiento, la gestión y la administración de los recursos públicos de la universidad o cualquier organismo así como los resultados de la gestión, acciones y estadísticas; o bien información sobre contrataciones, convenios, etc.
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