El gobierno de Maximiliano Pullaro continúa con las evaluaciones del gobierno que Omar Perotti dejó en Santa Fe. Entre los múltiples análisis interesa SF500, un companny builder creada el 3/2022 y que une a Bioceres, a la provincia de Santa Fe y la comunidad de innovación, con el fin de impulsar la creación y el crecimiento de 500 startups durante los próximos 10 años en Argentina, pero que todavía no lo logró.
Las company builder son organizaciones que tienen como finalidad impulsar y apoyar startups con fondos públicos y privados. En el caso de SF500, su objetivo es transformar equipos de investigadores en fundadores de startups biotecnológicas para formar 500 nuevas empresas de base tecnológica en Argentina.
Fondos
Desde su inicio, SF500 se financió con un aporte privado de US$300 millones de parte de Bioceres —una empresa de biotecnología agrícola con base en Rosario— y un aporte público de $3 millones de parte de la provincia de Santa Fe. “De los 300 millones. 30 por año, 15 aporta Bioceres y 3 la Provincia. El 40 por ciento restante está destinado a inversores estratégicos. Ya hay varios. Los vamos a hacer públicos en las próximas semanas”, había explicado a El Litoral Francisco Buchara, el CEO de SF500.
En cuanto a la potencialidad para desarrollar empresas de base biotecnológica, nadie en el gobierno actual duda de que Santa Fe tiene jugadores fuertes, como la propia Bioceres. Pero en el gobierno hay muchas dudas sobre el impacto que tuvo realmente SF500, y precisamente Buchara es sobre quien se posó el ojo de la actual gestión santafesina.
Buchara, quien también se desempeñó como secretario de Asuntos Estratégicos de Santa Fe, contó a fines de 2022 que ya había asociadas 17 compañías y dijo “Vemos que se puede, estamos muy felices de este primer año como equipo; existe un activo intangible, de gente que aporta a hacer cosas relevantes y hacer el bien”.
Francisco Buchara, el CEO de SF500, el fondo que Omar Perotti le dejó a Maximiliano Pullaro en Santa Fe.Sin embargo, a fines de 2023 los empresarios del sector comenzaron a dudar sobre el alcance que tuvo SF500 en sus casi 2 años de vida, y Buchara empezó a ser señalado por no darle más extensión al negocio, ni abrirlo como se suponía. También comenzaron las sospechas porque desde que Buchara entró al gobierno de Perotti, y luego cuando comenzó a ser CEO del fondo, empezó a levantar su imagen pública, y los referentes del sector creen que se dedicó más a esto que a establecer lazos con las biotecnológicas. En fin, Pullaro no duda de la potencialidad del proyecto y quiere mantenerlo. Pero analiza algunas cuestiones de funcionamiento, entre ellas, la función del CEO. Mientras tanto, Bioceres apostó fuerte al proyecto desde el comienzo y ahora espera las directrices del nuevo Gobernador.
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