La senadora por Río Negro, Silvina García Larraburu, propuso crear una Empresa Nacional de Ciencia y Tecnología Aplicada a la Salud, Investigación y Diagnóstico, con sede en Bariloche.
La iniciativa surge como medida para intentar resolver los problemas registrados en el último tiempo en Argentina por la demora en el ingreso de insumos estratégicos para salud, como los reactivos para tomografías.
Proyecto de Ley
La propuesta fue presentada como proyecto de ley en el Senado, según informó la parlamentaria barilochense, que además preside la Comisión de Ciencia y Tecnología, con el objetivo de “contribuir a resolver los problemas sanitarios y sustituir importaciones en productos de alta tecnología y valor agregado, que hacen a la soberanía científico-tecnológica y sanitaria del país”.
La semana pasada, la Cámara de Instituciones de Diagnostico Médico a nivel nacional, advirtió problemas en el ingreso al país de los insumos estratégicos para el sector de la salud y advirtió el riesgo de desabastecimiento de productos indispensables para el diagnóstico y tratamiento de pacientes.
Sustitución de importaciones
García Larraburu indicó que “en Argentina y la región, existe una dependencia casi total hacia proveedores extranjeros para insumos claves, como pueden ser los reactivos y kits para investigación y diagnóstico. Esto implica un costo elevado, que prolonga los tiempos de espera, y hacen engorrosos los procesos de compra”.
La senadora propuso crear una empresa con sede en Bariloche para “constituir una empresa equivalente a Y-TEC, con participación de Conicet, los Ministerios de Ciencia y Tecnología y Salud, capaz de funcionar como un ente autárquico competitivo en el mercado nacional e internacional”.
Indicó que “los productos que fabricará la empresa presentan una gran necesidad de producción nacional y son de muy amplio uso por múltiples sectores, incluyendo las universidades, el sistema hospitalario, los laboratorios de análisis clínicos, y otras entidades públicas y privadas”.
“En conjunto, el mercado interno potencial para el emprendimiento consiste en un mercado neto de importaciones cercano a U$S700 millones anuales, constituyendo la principal parte de la balanza comercial deficitaria para ese rubro. Asimismo, la misma problemática de ausencia de proveedores locales se da en toda Latinoamérica, representando un mercado potencial de U$S 5.000 millones anuales”, puntualizó García Larraburu en su proyecto.
Preciso además que se plantea un modelo de negocios “centrado en las necesidades reales de la demanda nacional y regional”. Y remarcó que favorecerá la sustitución de importaciones, la generación de empleo genuino, el desarrollo científico-tecnológico, y la participación del Estado en sectores estratégicos.
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