Las universidades nacionales ya empezaron a visibilizar el deterioro institucional del que son objeto, a partir de la decisión del gobierno de Javier Milei de dejarlas funcionando con el mismo presupuesto que tuvieron en 2023, con una inflación que va proyectada a más del 200% anual.
La situación es crítica, y así lo manifestaron nada más y nada menos que desde la propia Universidad de Buenos Aires (que concentra buena parte de los recursos destinados a las casas de estudios superiores), la Universidad Nacional de Rosario y la Universidad Nacional de Río Cuarto.
De hecho, el Consejo Académico de la UBA le pidió al rector Ricardo Gelpi, que interceda ante la ministra Sandra Pettovello para garantizar los recursos para las funciones de docencia, investigación y extensión.
La situación abre un foco más de tensión en la relación interna entre el radicalismo, el PRO y La Libertad Avanza, puesto que las casas de estudios superiores son un espacio de gestación de buena parte de los dirigentes políticos de la UCR que luego dan el salto a la política nacional.
De hecho, las tres casas de estudios superiores son gestionadas por el radicalismo. Hoy la situación es crítica, y comenzó a trasladarse la preocupación incluso al estudiantado que ya llama a una manifestación esta tarde en la Ciudad de Buenos Aires, para defender la gratuidad y el carácter público.
La UBA, con los guantes puestos
Ante la inflación registrada en 2023 y el inicio de 2024, el Consejo Académico consideró ”necesario manifestar el estado de extrema preocupación de la comunidad universitaria“ y peticionar ”ante las áreas de gobierno correspondientes a efectos de garantizar la continuidad de sus funciones en docencia, investigación, salud y extensión“, así como ”las actividades en el ámbito de sus Facultades, Colegios preuniversitarios, Hospitales y en todas sus instalaciones universitarias“.
La decisión del Consejo Académico de mandatar al rector de la UBA se centra en realizar las gestiones pertinentes ante el Ministerio de Capital Humano para activar ”la paritaria docente y no docente, actualizar el presupuesto destinado a los gastos de funcionamiento y para la asignación y actualización de las partidas vinculadas a la función salud, vitales para el funcionamiento de los Institutos Asistenciales“.
Por último, reportaron que solicitarán a la ”Jefatura de Gabinete de Ministros la asignación del presupuesto necesario para las actividades de ciencia y tecnología, a fin de sostener un sistema que es pilar esencial del mantenimiento de investigación y docencia de calidad en nuestras universidades públicas”.
A través de un comunicado emitido esta tarde, el Consejo Académico de la casa de altos estudios consideró a la educación pública universitaria como “un orgullo de la sociedad basada en los pilares de la gratuidad, autonomía, laicidad e inclusión social, con la máxima calidad académica, impulso de la investigación y compromiso con la sociedad” que requiere un financiamiento adecuado para desarrollar sus actividades“.
Difícil llegar a marzo
Otra de las grandes universidades del país también mostró las primeras consecuencias de la decisión del gobierno de Javier Milei. El rector de la Universidad Nacional de Rosario planteó como “difícil llegar a marzo”, con la partida presupuestaria del gobierno nacional.
El rector de la Universidad Nacional de Rosario (UNR), Franco Bartolacci, dijo que la situación económica de la casa de altos estudios “es muy compleja” y que con el presupuesto asignado será “muy difícil llegar más allá del primer semestre”, en el marco de los recortes y congelamiento de gastos que lleva adelante el gobierno de Javier Milei.
“La situación es muy compleja, tuvimos un 2023 muy difícil porque desde enero a diciembre recibimos la misma cuota para gastos de funcionamiento, y se hizo muy cuesta arriba llegar a fin de año sin lesionar ninguna actividad”, dijo Bartolacci.
En ese sentido, agregó que “con la decisión del Gobierno de reconducir el presupuesto 2023, cuando llega la cuota del mes de enero de gastos de funcionamiento, es la misma que en enero de 2023”.
Situación crítica
También visibilizaron la situación las autoridades de la Universidad Nacional de Río Cuarto (UNRC), en Córdoba, quienes alertaron que “la situación socioeconómica e institucional actual es crítica” por la falta de presupuesto.
La casa de estudios superiores planteó la dificultad para enfrentar el pago de servicios generales, además del sostenimiento de becas, sistema alimentario e insumos para investigación y la ejecución de programas especiales.
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