Los representantes de las entidades firmaron por unanimidad una carta en la que advierten sobre los peligros de la desfinanciación del organismo.
La UIA y la Sociedad Rural, a través de sus representantes en el Directorio del CONICET, rechazaron el ajuste de Javier Milei contra el organismo, que incluye el 20% de su planta administrativa. Además, expresaron su preocupación por el congelamiento de los ingresos a la carrera de investigador.
El directorio del Conicet está integrado por representantes de las universidades, de las provincias y uno de la Sociedad Rural y otro de la UIA.
En este caso se trata de María Laura Correa, en representación de la industria, y Manuel García Solá, en representación del agro, los que apoyaron la rebeldía del Directorio contra el pedido de despidos de Daniel Salamone.
El agro y la industria, se plantaron contra los despidos
Los ocho representantes del directorio firmaron por unanimidad una carta en la que advierten sobre los peligros de la desfinanciación del organismo que ejecuta el gobierno libertario.
“Los cambios en las cantidades de becas asignadas, sus fechas de inicio o las condiciones de las prórrogas, modificando las bases de convocatorias ya sustanciadas, van a tener consecuencias muy negativas que se van a prolongar por años, dado el tiempo que demanda la formación del personal científico-tecnológico, dañando las posibilidades de desarrollo nacional”, dijeron.
“Nicolás Posse, el Jefe de Gabinete, insiste en que CONICET debe despedir al 20% de su planta administrativa, unos 260 despidos. Como demostraron las auditorías del macrismo la planta administrativa de CONICET está en niveles subóptimos”, explicó en Twitter el investigador adjunto y delegado de ATE Gonzalo Sanz Cerbino.
El martes, Daniel Salamone, clonador y titular del Conicet, habilitó al área de recursos humanos para que comenzara a pedir a los consejos técnicos de las provincias la lista de futuros despedidos.
“No hubo ninguna auditoría como las que dice el vocero presidencial que se están haciendo, solo piden echar un porcentaje arbitrario de gente”, rechazó Sanz Cerbino.