La empresa pública de cannabis con fines medicinales de Jujuy, Cannava, se alista para comenzar a abastecer el mercado interno y define una estrategia para salir al mercado internacional.
“Cannava pasa a ser un actor de peso a nivel global. Estamos preparados para cubrir la demanda nacional y nos dirigimos a ser el principal exportador de Latinoamérica, lo que significa que la Argentina cómo país puede entrar en el radar internacional y pasar a ser el principal exportador de la región, en un mercado altamente exigente y competitivo como lo es el farmacéutico”, contó Gastón Morales, titular de Cannava, a Industria Cannabis tras convertirse en la primera planta elaboradora de cannabis medicinal habilitada por ANMAT.
Luego de dos años de exhaustivas auditorías, la sociedad estatal jujeña pasó satifactoriamente la inspección de Anmat. Los sistemas productivos de CANNAVA están en línea con los estándares de control de calidad más exigentes a nivel internacional, tomando como base las regulaciones farmacéuticas nacionales, la farmacopea alemana y un estricto cumplimiento de buenas prácticas agrícolas, de recolección y de manufactura (GACP – GMP).
La empresa con capitales del estado, creada en el 2018, ya se proyecta como un actor de peso global. Cuenta con una inversión pública de más de 20 millones de dólares y emplea a más de 200 jóvenes y profesionales jujeños.
La ANMAT aprobó el cannabis medicinal producido en Jujuy por Cannava
“Se va a intensificar el desarrollo de la cadena de proveedores locales y nacionales en relación a la tecnología e insumos que requiere nuestro proceso productivo, marcado por el horizonte de expansión de nuestro desarrollo” expresó Gastón Morales en referencia al impacto en la industria nacional y destacó: “Esta habilitación puede impactar también en la maduración de los diferentes sectores y actividades que engloba la naciente industria nacional del cannabis”.
Habilitación de la ANMAT
Con esta habilitación de la ANMAT, Cannava comienza a poner a punto su planta farmacéutica industrial, que podrá procesar hasta 20 kg de inflorescencias por hora y contará con una capacidad de producción anual de más de 1.5 millones de unidades de productos terminados.
Se conoce que el CBD y los más de 100 cannabinoides que produce la planta de cannabis la convierten en una nueva alternativa terapéutica a lo largo y ancho del planeta en esta nueva etapa de redescubrimiento científico de su potencia terapéutica para mejorar la calidad de vida de las personas y también de los animales, sobre todo en países que hoy transitan una fuerte epidemia de abuso de medicamentos derivados del opio.
“La concientización sobre la potencia científica y terapéutica de la planta es un camino largo que todavía tiene mucho por mostrarnos, que va a seguir repercutiendo en el plano político, productivo y económico. Hay que seguir transitando ese camino manteniendo el mismo compromiso y espíritu que nos impulsó a ponerlo en marcha hace 4 años”, concluyó Morales.