La presidenta del CONICET, Ana Franchi participó del acto por los 40 años del Instituto de Química y Fisicoquímica Biológicas “Prof. Alejandro C. Paladini”, con una jornada científico-académica.
Durante la jornada de intercambio académico y científico donde se disertó sobre la actualidad de la ciencia en Argentina, oportunidades, desafíos y los aportes del IQUIFIB a la industria biotecnológica, la presidenta del máximo organismo científico reiteró su postura frente a los discursos anti-científicos de La Libertad Avanza.
La presidenta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET) Ana Franchi participó de uno de los paneles junto con el director del IQUIFIB Rolando Rossi, el decano de la Facultad de Farmacia y Bioquímica (FFyB) Pablo Evelson así como autoridades y representantes de ciencia y tecnología de universidades públicas, de institutos, laboratorios y divulgadores/as científicos.
Transferencia
Durante el acto Franchi felicitó al Instituto y todos los equipos de trabajo que lo integran así como los aportes a las diversas temáticas de la gran área de la Ciencias Biológicas como a la biofísica, neuroquímica, neurología, inmunología, bioquímica y biología molecular, entre otras. “para continuar con el trabajo de calidad debemos fortalecer las sinergias con el sector privado e impulsar la transferencia tecnológica. Esto va ser positivo para la formación académica y científica de jóvenes y en conjunto con la UBA también debemos trabajar en políticas de permanencia y evaluación”, puntualizó Franchi.
Además, resaltó el trabajo de fortalecimiento de evaluación y federalización de la ciencia. “Estamos haciendo un cambio y estamos mejor en estos temas. Es un trabajo multidisciplinario que lleva tiempo pero estamos avanzando, a través de la Gerencia de Evaluación del Consejo, para que la evaluación sea más efectiva y se tome en cuenta lo federal. Además, cada vez está entrando más gente joven a las comisiones asesoras. Sin embargo, debemos estar acompañados por políticas públicas y por las leyes, ahora, la de financiamiento y la del Plan 2030, haberlas conseguido por unanimidad implica que todas las fuerzas políticas, de alguna manera, se comprometieron. Si queremos un país que nos incluya a todos y todas equitativamente y que sea soberano, no hay que poner en duda la importancia de la ciencia y tecnología”, concluyó la presidenta del CONICET.
“Si queremos un país que nos incluya a todos y todas equitativamente y que sea soberano, no hay que poner en duda la importancia de la ciencia y tecnología”
Ana Franchi, presidenta del CONICET
Por su parte, el director del IQUIFIB, Rolando Rossi, agradeció a los equipos de trabajo responsables de la organización de la jornada, así como a la FFyB, al CONICET y a los especialistas invitados y autoridades presentes y comentó, “El IQUIFIB ha hecho grandes aportes a la ciencia, iniciando con la trayectoria del Dr. Alejandro C. Paladini quien fue discípulo de Leloir. Él y otros/as más se distribuyeron en el país en aquella época y crearon centros de investigación de excelencia. Cada una de las ramas presentes en la creación del instituto han dando fruto a lo largo de estos 40 años, por ejemplo, se generaron ramas que estudian el transporte de sustancias a través de membranas neurológicas, otras que dieron origen al estudio de proteínas y ahora, últimamente, se está cada vez más incorporando grupos de investigación que se dedican a la biotecnología. Por supuesto, sin descuidar la ciencia básica. La esencia de que el Instituto tenga éxito es que no se descuida la ciencia básica. Y a partir de allí, bueno, las empresas biotecnológicas son las que tienen que venir a buscar a las y los investigadores preparados para generar ese tipo de servicios en las empresas”.
Financiamiento
En cuanto a los desafíos, Rossi remarcó que el más notable es el financiamiento debido a “la gran dependencia de la política y de la economía argentina. En este momento, el gran desafío es luchar contra la inflación, que se está comiendo todo nuestro presupuesto. La ciencia que no está basada en una economía estable, no puede ser una ciencia que progrese”.
A su turno, el decano de la FFyB, Pablo Evelson, resaltó las actividades que previamente a la jornada se han realizado fortaleciendo así su valor académico y científico. “La FFyB se ha caracterizado por su calidad y por buscar mostrar la importancia de la ciencia básica y aplicada y transmitir estos conocimientos a la solución de demandas sociales. Tenemos que pasar a las futuras generaciones la pasión con la que trabajamos; lo hemos hecho así en conjunto con los institutos de la Facultad, así mismo la importancia de la investigación pública”.
“Gran estratega”
En este marco, la investigadora del CONICET, Juana M.Pasquini hizo un recorrido por la historia, creación y crecimiento del Instituto resaltando los aportes en Ciencias Biológicas de los pioneros del IQUIFIB. Alejandro C. Paladini fue el primer director del Instituto por 20 años, “Paladini era un gran estratega y por ello supo estar a cargo durante muchos años del Departamento de Química Biológica”, comentó Pasquini.
Prosiguió con la contribución del Dr. José A. Santome no solo como pionero del IQUIFIB sino también como creador del Instituto LANAIS-PROEM. Luego, sobre el aporte del Dr. Juan M. Dellacha, Pasquini aseguró: “fue quien trajo al IQUIFIB el tema de la Hormona de Crecimiento, después de su estancia en el laboratorio del Dr. Sonnenberg. Es probable que él haya hecho algo fundacional con respecto a la biotecnología en Argentina ya que, gestionó la entrada al país del germen de la biotecnología latinoamericana”.
Pasquini, terminó el recorrido resaltando los aportes y sabiduría en biofísica de Alcides00 F.Rega y Patricio J. Garrahan, así como la contribución de Eduardo F. Soto en materia de neurociencias.
Luego, la jornada contó con una mesa de debate sobre los aportes del IQUIFIB a la industria biotecnológica. Y los becarios y becarias expusieron posters con las diversas temáticas actuales que llevan a cabo los grupos de investigación.
Asistencia
Estuvieron presentes, la vicepresidenta de Asuntos Científicos del CONICET, Claudia Capurro; el secretario de Ciencia y Técnica de la UBA, Sebastián Civallero; el investigador del CONICET en el Laboratorio de Cultivos Celulares de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas de la Universidad Nacional del Litoral, Ricardo Kratje; el director Ejecutivo de Biosidus, Marcelo Criscuolo, la directora de Innovación y Desarrollo Tecnológico en Grupo Insud, Graciela Ciccia; la directora de LANAIS-PROEM, Norma Sterin-Speziale y la periodista científica, Nora Bär. Tambien acompañaron la jornada, docentes, becarios y becarias y personal de apoyo y administrativo de la FFyB y del IQUIFIB.
Con esta actividad el Instituto fortalece las iniciativas académicas para promover la vocación científica e investigativa en los y las jóvenes.
Bioquímica y biofísica
El IQUIFIB es un Instituto dedicado a la investigación científica, a la docencia y a la formación de recursos humanos en bioquímica y biofísica. Unidad Ejecutora de doble dependencia con la Universidad de Buenos Aires (UBA) y el CONICET. Fue creado a fines de 1983, sucediendo al Centro para el Estudio de las Hormonas Hipofisarias, institución pionera en el estudio estructural de proteínas en el país.
El IQUIFIB
El IQUIFIB se generó a partir de un grupo de investigadores que se desempeñaban en el Departamento de Química Biológica de la Facultad de Farmacia y Bioquímica. En el momento de su fundación el Instituto reunía 20 investigadores y 19 becarios y alrededor de 21 proyectos distribuidos en 5 áreas dirigidas por los investigadores de CONICET con categoría Superior y Principal: hormonas proteicas, estructura y función de proteínas, fisicoquímica biológica, biología molecular, neuroquímica del sistema nervioso central.
Trabajan 39 grupos de investigación, cuyas líneas de investigación están organizadas en las siguiente grandes áreas: Biofísica Molecular, Bioquímica de hormonas, Bioquímica Patológica, Bioquímica Vegetal, Neuroquímica y Neurobiología, Transporte a través de membranas y Química Proteica. El IQUIFIB, incluye al LANAIS-PROEM, un laboratorio especializado de referencia a nivel nacional destinado a brindar servicios de secuenciación y espectrometría de masa con foco en el análisis proteico y en otras biomoléculas de interés. Su aporte resulta fundamental para la generación de conocimiento básico en la comunidad científica y para asistir al desarrollo y control de calidad en la industria biotecnológica.
En la actualidad el IQUIFIB está integrado por 67 investigadores/as, 17 becarios/as postdoctorales, 49 tesistas, 22 estudiantes de las carreras de Bioquímica, Farmacia, Licenciatura en Ciencia y Tecnología de alimentos y Licenciatura en Biotecnología y 9 integrantes de la Carrera del Personal de Apoyo.
Toda la información referente a las tesis doctorales finalizadas y los manuscritos publicados se detallan en la página web del instituto.
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