Tras el evento antivacunas organizado por la diputada del PRO, Marilú Quiroz, en el Congreso Nacional, el ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak, solicitó sanciones para los tres médicos que participaron en el panel del encuentro titulado “¿Qué contienen realmente las vacunas de covid-19?”.
El evento, planeado por legisladores del oficialismo y por aliados, y habilitado por el presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, tenía la finalidad de sembrar sospechas sobre la validez de las vacunas anti-Covid, que, entre otras cosas lograron evitar millones de muertes alrededor del mundo.
Entre otros asistentes, hubo médicos matriculados en el Colegio de la Provincia de Buenos Aires. Ahora, Nicolás Kreplak, ministro de Salud bonaerense, elevó un pedido de sanción para los profesionales de la salud que participaron activamente de la reunión y expresaron discursos e ideas contrarios a la salud pública.
Convocado por la legisladora del PRO Marilú Quiroz, la reunión se llevó adelante el 27 de noviembre. Tomaron la palabra pretendidos científicos, activistas antivacunas, médicos y otros voceros, que reprodujeron viejos mitos, teorías conspirativas y demás ideas descabelladas, ya desmentidas hace años por la comunidad científica.
Tres médicos bonaerenses, sancionados
En un documento al que accedió el medio Página/12 Kreplak dirigió una denuncia al Colegio de médicos de la Provincia de Buenos Aires para que tome cartas en el asunto. Específicamente, los médicos matriculados en la provincia remitidos en la nota son Oscar Botta, Lucía Langer Segovia y Chinda Bandolino. En vez de promover la importancia de las vacunas contra el Sars CoV-2 para superar la peor crisis sanitaria de la historia moderna, estos profesionales difundieron ideas sin sustento.
Al menos, así lo expresa el titular de la cartera sanitaria bonaerense: “Este Ministerio solicita que se sancione con todo el rigor legal a los médicos referidos por incumplimiento del Decreto-Ley 5413/58 y el Código de Ética. Ello, considerando que las actividades llevadas a cabo por los participantes del evento resultan claramente contrarias a la ética profesional y a la legislación sanitaria vigente, lo que pone en riesgo al sistema sanitario y a la adecuada implementación de las políticas públicas en salud en materia de vacunación”.
Difusores de mitos y conspiraciones en el mundo antivacunas
El texto firmado por Nicolás Kreplak expresa la gravedad del accionar de los profesionales citados y señala declaraciones consignadas por los mismos: Oscar Botta disertó sobre vacunas de calendario y autismo, Lucia Langer sostuvo que las personas vacunadas presentaban un “exceso de aluminio en sangre” y Chinda Brandolino reiteró una supuesta relación entre vacunas y “autismo/efectos adversos” similar a los planteos de Botta.
El documento lo expresa de este modo: “Las manifestaciones y postura de los profesionales involucrados revisten gravedad por su impacto en la salud pública, en tanto que representa una clara amenaza sanitaria. Asimismo, dicha postura es incompatible con los compromisos éticos que rigen el ejercicio de la medicina y la preservación de la salud pública y colectiva y es contraria a la legislación existente en materia de política de inmunizaciones“.
Vale destacar que las sociedades científicas y médicas del país habían solicitado al presidente de la Cámara de Diputados, Martín Menem, la suspensión del evento. Finalmente, los pedidos fueron desestimados y la reunión antivacunas se celebró igual en una sala del Congreso.
El documento firmado por Kreplak también cita al Código de Ética del Colegio de Médicos de PBA, como manera de dimensionar la imprudencia de los tres profesionales que participaron de la jornada antivacunas. “El médico colaborará con la Administración Pública en el cumplimiento de las disposiciones legales que se relacionará con la profesión y cooperará con los medios técnicos a su alcance, en la vigilancia, prevención, protección y mejoramiento de la salud individual y colectiva”, subraya.
