Durante un encuentro mantenido entre las autoridades de la empresa de base tecnológica Y-TEC, perteneciente a la petrolera nacional YPF, los ministros de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, y de Transporte, Mario Meoni, la presidenta del CONICET, Ana Franchi, y la Jefa de Gabinete, Carolina Vera, evaluaron las chances de uso de hidrógeno en el transporte.
Las autoridades mantuvieron diálogo con investigadores del CONICET que se desempeñan en la EBT y allí Meoni ratificó la decisión del Gobierno nacional de “avanzar en la innovación de nuevas fuentes de energía” en el transporte, pero sostuvo que “la preocupación es trabajar con fundamentos científicos”.
Meoni se mostró “entusiasmado” con el trabajo consensuado para la utilización de nuevas energías para la movilidad que están siendo investigadas y desarrolladas por Y-TEC, junto a investigadores del CONICET, a quienes transmitió su voluntad de redirigir recursos para invertir en prototipos y proyectos a largo plazo.
Propulsión de vehículos y producción eléctrica
Analizaron, básicamente, dos aplicaciones: la propulsión del vehículo y la producción eléctrica para servicios secundarios a bordo del vehículo como la climatización, sistemas de comunicación, sistemas electromecánicos del vehículo u otros servicios.
En ese contexto, Meoni destacó que se pretende “avanzar en la innovación de nuevas fuentes de energía en el transporte” porque entienden que “puede ser una manera de incentivar nuevas industrias”.
“Tenemos naturalmente recursos disponibles que volcamos todo el tiempo en materia de combustibles fósiles y que, más allá de que podamos tener esos combustibles como el gas natural en el GNC o GNL en muchas zonas, queremos impulsar esa conversión en transporte público pensando en algo nuevo a largo tiempo”, aseveró el funcionario.
Micro eléctrico urbano
En este sentido, remarcó que la preocupación es “trabajar con fundamentos científicos” y agregó que “hoy hay una tendencia de imponer un micro eléctrico urbano a cualquier costa y eso tiene un costo enorme, porque los que hay son 100% importados, valen 450 mil dólares, contra uno de 150 mil que funcionan con gasoil o 200 mil en GNC“.
Contemplando que tan solo en el Área Metropolitana de Buenos Aires circulan 18 mil unidades, Meoni convocó al consenso para definir “hacia dónde vamos a direccionar nuestros recursos”.
“Hay una fuerte tendencia mundial a dejar de utilizar combustibles fósiles como el gasoil o la nafta, entendiendo que en nuestro país hay gas y eso es importante porque el hidrógeno se produce a partir del gas. Queremos crear una base sustentable y destinar recursos para que en cuatro años podamos tener una plataforma donde avanzar”.
Mientras tanto, Salvarezza aseguró que ellos van a sumar “todas las capacidades tecnológicas para que el producto que uno pueda desarrollar tenga la mayor integración nacional, el mayor conocimiento tecnológico y armaremos consorcios que estén aportando en aquellos aspectos que necesiten I+D”.