Tras la aprobación en las comisiones de Ciencia y Tecnología y de Hacienda y Presupuesto, el proyecto de Ley de Financiamiento de la Ciencia y la Tecnología podría ser debatido en la próxima sesión de la Cámara de Diputados.
Con el aval de la comisión de Presupuesto, el dictamen se podrá debatir en la próxima sesión, antes del cierre del período de sesiones ordinarias, el 30 de noviembre.
Sin embargo una de las alternativas es que se prorrogue la actividad del Congreso durante el mes de diciembre para dar curso a iniciativas que el Poder Ejecutivo quiere tener definidas antes de fin de año.
Una de ellas es el impuesto a las grandes fortunas, que debe tratar el Senado de la Nación, y que la vicepresidenta, Cristina Fernández, ya pidió que se debata en sesiones extraordinarias.
Si lo mismo sucede en la Cámara de Diputados, el proyecto, que tuvo consenso unánime en las dos comisiones, y aval del Poder Ejecutivo, del ministro de Ciencia y Tecnología, Roberto Salvarezza, y del ministro de Economía, Martín Guzmán, podría tratarse en diciembre, de no prosperar esa chance la próxima semana.
¿Qué es la Función Ciencia y Técnica?
El proyecto unificado de Financiamiento del Sistema Nacional de Ciencia, Tecnología e Innovación plantea llevar la inversión del Estado Nacional al 1% del PBI, en 2032, alcanzando a todos los organismos y dependencias que la integran la Función Ciencia y Técnica.
El presupuesto nacional se divide en finalidades y funciones. Las finalidades son cinco: Administración Gubernamental; Servicios de Defensa y Seguridad, Servicios Sociales, Servicios Económicos, y Deuda Pública.
La Función Ciencia y Técnica se encuentra integrada en la Finalidad “Servicios Sociales” y engloba a 17 organismos científicos y tecnológicos, distribuidos en nueve ministerios.
Esos 17 organismos son una parte (la mitad) del total de lo que representa el sector de ciencia y tecnología nacional. Es decir que la Función Ciencia y Técnica representa aproximadamente el 50% de toda la inversión de ciencia y técnica que hace la Argentina.
En ese espectro más amplio, que esta ley no alcanza (pero si impacta), está la inversión que realizan las empresas privadas, por ejemplo, y los cargos de dedicación exclusiva de las universidades.
La Ley, por tanto, plantea incentivar con inversión en un área específica y considerable alcanzada por el sector público, para generar una sinergia en ese resto del sistema científico y tecnológico, pero también en el productivo.
“El objetivo fundamental es establecer un incremento progresivo, constante y sostenido en el tiempo destinado a la Función Ciencia y Técnica por la capacidad estratégica que tiene esta política pública en el desarrollo social, económico y ambiental de la Argentina”, aseguró José Luis Riccardo durante la presentación de la iniciativa en la Comisión de Hacienda.
Objetivos
Sin embargo los otros objetivos señalados en el proyecto son la federalización de la inversión, la transferencia de conocimiento al sector productivo, la diversificación y promoción del valor agregado en la matriz productiva, potenciar la economía del conocimiento, formar recursos humanos, mejorar la estabilidad de las remuneraciones de investigadores e investigadoras y la igualdad y equidad de género.
Los legisladores y legisladoras consiguieron consensuar una iniciativa que retoma aspectos de los proyectos del propio Riccardo (que planteaba escalonar la inversión del sector hasta el 3% del PBI en 2035, comenzando en 2021 con el 0,35%) y de Claudia Bernazza (FdT), vicepresidenta de la comisión (que pretendía llevar la inversión de la Función Ciencia y Técnica hasta el 1% en 2030).
Hoy esa inversión se encuentra en el 0,25% del PBI, ( en su mejor época, durante el kirchnerismo alcanzó el 0,35% del PBI) por lo que la iniciativa plantea cuadruplicar la asignación a lo largo de once años, con una cláusula que impide que los recursos año a año sean menores que el año anterior.
El máximo histórico alcanzado en Argentina, en la función ciencia y técnica es el 0,35% (alcanzado entre 2013 y 2015). En 2012 la inversión total en I+D (pública a nivel nacional y provincial + la inversión privada) alcanzó el 0,63%, monto más alto de la historia.
2021 0,28% del PBI
2022 0,31% del PBI
2023 0,34% del PBI
2024 0,39% del PBI
2025 0,45% del PBI
2026 0,52% del PBI
2027 0,59% del PBI
2028 0,68% del PBI
2029 0,78% del PBI
2030 0,90% del PBI
2031 0,95% del PBI
2032 1% del PBI
La iniciativa beneficiaría a todos los organismos de ciencia y tecnología que integran la Función y Técnica y que se distribuyen entre 9 ministerios: La Fundación Miguel Lillo, CONICET, la Comisión Nacional de Energía Atómica (CNEA), la Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), el Instituto Nacional del Agua (INA), el Banco Nacional de Datos Genéticos (BNDG), el Ministerio de Ciencia y Tecnología (MinCyT), el Instituto Geográfico Nacional (IGN), el Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI), el Servicio Geológico Minero (SEGEMAR), la Administración Nacional de Laboratorios (ANLIS), el Servicio Hidrográfico Naval (SHN), el Centro de Investigación en Tecnologías para la Defensa (CITEDEF), el área de Ciencia y Técnica de las Universidades Nacionales, el Instituto Nacional de Prevención Sísmica (INPRES) y el Instituto Antártico Argentino (IAA).
El proyecto se plantea como base de consistencia en financiamiento para la Ley 25467, de Ciencia, Tecnología e Innovación e Innovación productiva, para el corto, mediano y largo plazo.