Pablo Bercovich, ex Subsecretario PyME de la Nación y actual director de la Consultora Marca PyME consideró que “IMPSA fue mal vendida, no tenía nada de perdida” y condenó que, tras la asunción de Javier Milei, la empresa estatal no se presentara a ninguna licitación, cuando las venía ganando. “Eso es lo más preocupante: paralizar empresas, desguazarlas para venderlas más baratas”.
Fundado en 1907 el establecimiento fabril privatizado se dedica a la fabricación de turbinas, torres eólicas y torres de abastecimiento para la industria del petróleo y gas, equipamientos esenciales en los tiempos que corren. Y, además ofrece tecnología, dado que un tercio de sus trabajadores calificados son ingenieros.
Seguido enfatizó que en sí misma “la privatización es un problema pero el problema mayor es que fue a una empresa extranjera, norteamericana y vinculada a Donald Trump”. Al tiempo que señaló, Trump intervino para comprar y Milei para vender “por 24 o 25 millones de dólares” porque dicen que la empresa tiene muchas deudas. Pero, también tiene terrenos por 400 o 500 millones de dólares”.
Una empresa estratégica paralizada por Macri y Milei
Asimismo, recordó que antes del 2020 la empresa era privada pero tuvo que pedir rescate al Estado “porque entre el 2014 y 2015 empezó a tener problemas con una internacionalización a Brasil y algunos negocios fallidos en Venezuela. Y luego sobrevino el macrismo que no hizo nada por la infraestructura del país, y esta es una empresa vinculada a eso”.
El entrevistado explicó que “el Estado la rescata en 2020 porque es una empresa hiper estratégica vinculada a sectores hidroeléctricos y nucleares. Además, sólo hay entre 5 y 10 en el mundo que hacen lo que hace IMPSA. Tenía más de 1000 trabajadores y era parte de la cadena de valor de más de 100 PyMES”.
Además, “lo que hizo el Estado en el 2020 fue normalizar las deudas, negociando con los acreedores”. De hecho, “llegó a pérdida 0, ganando licitaciones en todo el mundo. Y se preveía que en 2025 ya iba a tener ganancias netas. Pero en 2024, Milei la paralizó y no se presentó a ninguna licitación, y por eso hoy se vendió más barata”.
Y, concluyó que en un escenario donde, en las elecciones presidenciales norteamericanas, los dos candidatos “peleaban para ver quién era más industrialista” en el gobierno argentino “no la ven” y no entienden que “son los factores exógenos los que hacen caro los productos de la industria nacional”.
Testimonio para AM 1270:
Seguí leyendo:
Al final, Milei le vendió IMPSA a la estadounidense ARC Energy