Como parte del proceso que la semana pasada lanzaron la petrolera estatal Ancap y la eléctrica pública UTE por un proyecto piloto de hidrógeno verde para camiones y buses, la empresa ganadora podrá recurrir a una exoneración de 100% del impuesto a la renta por descontar en un mínimo de 4 años y máximo de 10 años.
Los equipos por utilizar en el proyecto gozarán de la exoneración del impuesto al patrimonio por toda su vida útil y los productos importados que no compitan con la industria local obtendrán una devolución del IVA.
Por su parte, Ancap ofrecerá el derecho de uso de un área dentro de polo Capurro para instalar la planta para la producción, almacenamiento y dispensado del hidrógeno y otra para acceso, maniobra y estacionamiento de camiones y buses con posibilidad de una ampliación a futuro.
A esto se le sumarán la disponibilidad de locales que pueden adaptarse para instalar un taller de mantenimiento especializado para vehículos de celda de combustible y el suministro eléctrico de hasta 5MW en 30kV.
Finalmente, UTE brindará un menú de precios de energía eléctrica para el proyecto piloto con el fin de que la compañía opte por la modalidad de tarifa diaria continua y discontinua y semanal discontinua. La firma ganadora también tendrá que elegir la cantidad de horas que será suministrada la potencia contratada.
“UTE cuenta con las garantías para apoyar y apostar firmemente a lo que refiere al hidrógeno y la descarbonización”, señaló su presidenta, Silvia Emaldi, en el evento de lanzamiento del data room el 8 de abril.
Para la producción de fertilizantes o amoníaco verde y combustible marítimo, los criterios para el análisis de los proyectos serán similares a los del transporte pesado.
La diferencia es que, en estos casos, Ancap y UTE analizarán un menú de precios de energía eléctrica específica, que pueden contemplar una alta disponibilidad de renovables en el caso de que lo permita el punto de conexión a la red requerido.
En el data room, las empresas estatales subirán los principales detalles y objetivos del programa y servirá para intercambiar opiniones para crear oportunidades de mejora que permitan potenciar el impacto y la eficiencia de un eventual proyecto que sea factible, realizable, de rápida de ejecución y escalabilidad.
El esquema para el grupo de transporte pesado constará de un proceso competitivo entre las empresas que presenten sus propuestas.
La compañía que resulte ganadora deberá invertir al menos en 10 camiones de 17t (peso bruto) o en buses de 9m de largo, que realicen un recorrido mínimo promedio anual de 3500km/d entre todos.
El hidrógeno se producirá por electrólisis con energía eléctrica de la red nacional y los electrolizadores tendrán que contar con una potencia nominal mínima de 1.50MW.
Las compañías que presenten sus propuestas deberán tener experiencia en las distintas secciones que componen el proyecto. La ganadora llevará adelante el programa durante 10 años.
En ese lapso se encargará del diseño, la construcción, el financiamiento, la operación y el mantenimiento del proyecto. A su vez, será responsable de la compresión, el almacenamiento, el dispensado, los vehículos a celda de combustible (camiones o buses) y los transportistas.
La empresa deberá asegurarse la demanda de hidrógeno que produzca el proyecto y el uso de los camiones/buses a través de los contratos que firme con los transportistas, que podrán ser miembros del consorcio que presente en su propuesta.
Para adjudicar el contrato, Ancap y UTE compararán el tipo y la calidad de cada uno de los proyectos, además del monto del apoyo estatal que soliciten las compañías que se postulen en el proceso, según los términos y condiciones, que aún no se han establecido.
Según estudios de prefactibilidad del Ministerio de Industria, Energía y Minería, el país cuenta con el potencial para desarrollar en forma competitiva el hidrógeno verde.
“Estamos embarcados en desarrollar una hoja de ruta del hidrógeno verde en Uruguay, hoja de ruta que se complementa con otras iniciativas que forman parte de la política energética, como son el impulso de la movilidad sostenible, la economía circular, las redes inteligentes para la gestión de la demanda eléctrica (?), en definitiva, una política integral energética que se tiene que articular con una política nacional de desarrollo”, afirmó el ministro Omar Paganini en la presentación del data room, evento virtual al que asistieron más de 600 personas de 30 países, de acuerdo con un comunicado de Ancap.
