Costa Rica se prepara para presentar, en diciembre, su modelo de matriz energética renovable y sus medidas para la protección ambiental, durante la 25º Conferencia de Partes (COP 25) de la Convención de Cambio Climático, realizada en San José, previo a la convención en Chile.
Así lo anunció su presidente, Carlos Alvarado, en una entrevista para la agencia AFP. “Tenemos ciertas condiciones históricas que permiten anticipar lo que serían los escenarios de la descarbonización”, declaró Alvarado.
El país centroamericano se precia de su matriz eléctrica renovable y sus medidas de protección ambiental, como “un laboratorio para la descarbonización económica” a la que aspira el mundo para contener el cambio climático.
El mandatario abordó el tema en momentos que 1.500 delegados de todas las regiones del mundo discuten en San José la agenda que será abordada en la 25 Conferencia de Partes (COP25) de la convención de cambio climático, que se celebrará en diciembre en Chile.
Energías limpias
Recordó que el país tiene una matriz energética entre las más limpias del mundo, que en los últimos cuatro años ha mantenido más de 98% de generación renovable, lo que le permite poner en marcha el tránsito a una movilidad eléctrica.
El país exime de impuestos a los vehículos eléctricos y comenzó a adquirirlos en instituciones públicas, al tiempo que ofrece facilidades crediticias para la importación de autobuses y taxis de este tipo.
“Costa Rica ha sido un laboratorio en cómo se ha recuperado la cobertura forestal. Podemos decir que es rentable, que permite proteger ecosistemas y aumentar especies en peligro”, agregó Alvarado, al citar que en los últimos 30 años la cobertura de bosques pasó de 30% a 58% de su territorio.
Al mismo tiempo, el gobierno de Alvarado lanzó en febrero un plan de descarbonización que apunta a eliminar el uso de combustibles fósiles hasta 2050, con cambios en el transporte, la producción agrícola e industrial y el manejo de la economía.
Descarbonización
Las metas planteadas por la iniciativa coinciden con las metas adoptadas en 2015 por el Acuerdo de París, que prevé la carbono neutralidad del mundo para 2050.
Opositores políticos del presidente han cuestionado el énfasis que su gobierno ha dado a la descarbonización en momentos en que la economía da señales de debilidad, con un declive en las proyecciones de crecimiento de 3,2% a 2,2% para este año, según el Banco Central.
Pero Alvarado insistió en que “cuando se ve la reducción de emisiones, se ve una reducción de costos en salud, menos accidentes de transporte, además de rentabilidad económica” por las inversiones proyectadas.
Mencionó un estudio conjunto de la corporación estadounidense Rand, el Tecnológico de Monterrey, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID) y la Universidad de Costa Rica que proyectó una ganancia de 19.500 millones de dólares para el país hasta 2050 si se cumplen los cambios en el transporte y el modelo productivo.
Recordó también el caso del tren eléctrico que recorrerá las áreas más pobladas del país y deberá comenzar su construcción en 2021, como parte del esfuerzo por reducir la congestión vehicular y suprimir las emisiones de carbono.
“La descarbonización requiere una gran inversión pública, como el caso del tren, pero esa inversión tiene un gran retorno económico”, sostuvo el mandatario.
Metas más ambiciosas
Alvarado consideró que el cambio a un modelo productivo amigable con el ambiente no es solo una exigencia ética, sino que los consumidores cada vez más demandan productos ambientalmente responsables. Lo mismo vale para los políticos.
“En Europa son los ciudadanos los que exigen a los políticos tomar posiciones contundentes en esta materia, y en América Latina ya hay algo de eso, pero es cuestión de tiempo para que sea más fuerte, sobre todo cuando se incorporen los votantes jóvenes”, anticipó.
Por ello, dijo esperar que la COP25 de Chile concrete acciones más ambiciosas para enfrentar la crisis climática.
“El mejor desenlace de Chile es algo concreto, algo tangible y algo ambicioso”, dijo Alvarado, a pesar de que países grandes como Estados Unidos y Brasil han renegado de los compromisos adquiridos en materia climática.
“Se están generando condiciones que podrían empezar a revertir una actitud no muy reactiva de parte del mundo”, por la presión de jóvenes que se movilizan en todo el mundo para exigir una acción a favor del clima.
Durante la cita previa a la COP, en San José, Costa Rica se alió a Finlandia, Francia, Gabón, Granada y Reino Unido en una alianza que busca un compromiso de proteger 30% del territorio y los océanos para alcanzar las metas ambientales.
“La voz de Costa Rica es muy escuchada a pesar de ser un país muy pequeño. Es un ejemplo viviente en materia de energía eléctrica limpia, reforestación, producción sostenible de café, turismo sostenible”, aseguró Alvarado.
Fuente: AFP.