Un equipo de científicos del CONICET desarrolló un tratamiento con células madre que permitirá mejorar la preservación de pulmones que son donados para trasplante, un factor clave para aumentar la cantidad disponible de estos órganos para salvar vidas que no aumentó el año pasado y se mantuvo en un 8% pese a la aplicación de la llamada Ley Justina, informó ese organismo.
El ensayo se realizó en animales y allí se comprobó que las células madre mesenquimales derivadas del cordón umbilical humano tienen un efecto antiinflamatorio en los pulmones, lo que permitirá una mejor preservación de este órgano que se necesita conservar intacto para su trasplante.
“Es la primera vez que se administran células madre mesenquimales durante la ablación del pulmón para probar su efectividad en preservación tisular”, sostuvo el investigador Gustavo Yannarelli y agregó; “En el exterior nadie ha utilizado aún estas células para prevenir el daño pulmonar propio de la procuración aunque sí para para reacondicionar pulmones”.
La investigación fue publicada en la revista Stem Cells Internacional y según el Conicet “toma relevancia porque hace un año, se aprobó la Ley Justina” que estableció que toda persona mayor de edad, salvo que exprese su voluntad contraria, es donante de órganos.