La empresa de telecomunicaciones del Estado Nacional, ARSAT, anunció la tercera etapa del proyecto de ampliación de la Red Federal de Fibra Óptica (REFEFO) que ya cuenta con 34.500 kilómetros.
La iniciativa de ARSAT se da en conjunto con la Secretaría de Innovación Pública de Jefatura de Gabinete con el objetivo de reducir costos y precios los servicios en los puntos a donde llegue la red.
“Lo más importante para nosotros es el rol que tenemos, que es el de transporte mayorista de alta capacidad de Internet a bajo costo. Llegamos hasta los nodos en las ciudades, pueblos o localidades y desde ahí colaboramos y promovemos para que las SAPEMs, cooperativas, cableras o pymes realicen la última milla”, expresó el presidente de la empresa, Pablo Tognetti.
“El desarrollo de la tercera etapa de la REFEFO representa para nosotros la continuidad de un Plan de Conectividad integral que se inició en 2010 durante la presidencia de Cristina Fernández de Kirchner”, sostuvo la secretaria de Innovación Micaela Sánchez Malcolm.
La Red Federal de Fibra Óptica
El despliegue de la REFEFO se retrotrae años atrás: ARSAT poseía a fines de 2014 más de 30 mil kilómetros de fibra óptica tendida. La red, en aquel año, ya tenía 25.770 km. de infraestructura troncal y 4.170 km. de red provincial, alcanzando más de 1.800 localidades. Esto representaba el 80% de la inversión total de la red actual. En el período 2016-2019, se realizó la iluminación de gran parte de ese tendido inicial, y se hizo con equipamiento adquirido mediante las licitaciones realizada durante los años 2012 y 2013.
Actualmente, la REFEFO cuenta con 34.500 kilómetros tendidos a lo largo y ancho del país, de los cuales 31.150 están iluminados. De forma adicional, también hay redes provinciales.
Desde que la empresa comenzó a llevar conectividad a todo el país como mayorista, los precios tendieron a la baja. Es que en ciertos lugares había un mercado de pocos participantes, entonces la llegada de ARSAT generó una mayor competencia y por consecuencia, una caída en los valores de las tarifas. Esto se debe a que cualquier ISP o proveedor de Internet puede hacer un acuerdo y ofrecer el servicio de última milla.
“Que regulemos el mercado es clave, porque para cumplir con la política de Estado de conectar a los argentinos, es necesario que el costo sea bajo”, agregó Tognetti. ARSAT llega a zonas remotas de la República Argentina, inclusive a aquellos sitios donde comercialmente no es competitivo llevar fibra óptica. En este sentido, el titular de la empresa explicó que “nuestro objetivo no es el lucro económico máximo sino el lucro social máximo, que a su vez también tiene un impacto económico”.