El físico, investigador del CONICET y Secretario de Planeamiento de la Universidad Nacional de Hurlingham, Jorge Aliaga, se refirió al volumen de muertes ocasinado por el avance del coronavirus a nivel nacional, que en el día de ayer alcanzó los 100.250.
Argentina se encuentra en el puesto número 12, entre los países que registran mayor cantidad de muertes por cada cien mil habitantes, desde que inició la pandemia de coronavirus, pero, además, la región latinoamericana es una de las que tiene los peores valores a nivel mundial.
De hecho, el continente tiene cuatro países, Perú, Brasil, Colombia y Argentina entre los 15 países con mayor cantidad de muertes cada cien mil de habitantes, ocasionadas por el virus, a nivel mundial.
En nuestro país, se dio el caso particular de una baja significativa en el volumen de contagios, aunque esa merma no fue correlativa con una baja en la cantidad de muertes.
Es que habiendo tocado un techo de casi 40.000 casos en 24 horas, con la reapertura de las clases presenciales, a principios de marzo, ayer se contabilizaron 19.697 casos en las últimas 24 horas.
Sin embargo, el dato sobresaliente fue que el país superó las cien mil muertes por coronavirus, al registrarse 614 decesos, en el día de ayer.
En diálogo con Urbana Play 104.3 FM, Aliaga sostuvo que “el panorama en general, en occidente, es malo”, comparado con algunos países de oriente que desde el principio buscaron otra estrategia que no fue simplemente aplanar la curva y evitar que colapse el sistema de salud, sino aplastar la curva, es decir, no tener casos, como es el caso de Australia, Nueva Zelanda, China, Corea del Sur, que tuvieron estrategias de eliminación de casos con medidas de confinamiento muy duras durante cuatro o cinco semanas, y después un control muy estricto de los ingresos de personas que venían de otras zonas a zonas libres de virus”.
“Los casos de muertos por habitantes de estos países por habitante son incomparables con el resto de occidente”, sostuvo Aliaga, y manifestó que “Argentina está mal, son 22 cada diez mil, un número muy alto”.
“Argentina tiene 330 mil fallecidos por año por todas las razones, por lo que cien mil es un número enorme para el período de un año”, evaluó Aliaga, y aseguró que “la cifra sube en las edades de 50 a 55 años hasta el 50%”, dijo Aliaga.
El físico e investigador, y asesor del gobierno de Axel Kicillof en temas de pandemia, se refirió a la situación en la provincia de Buenos Aires, que tiene uno de los niveles de letalidad más altos del país en números absolutos, con 50 mil muertes (la mitad del valor nacional).
“El AMBA tiene más casos que el interior del país, hubo muchos más casos en proporción por cantidad de habitantes en la zona metropolitana que en el interior del país“, dijo Aliaga, y sostuvo que “si hubiéramos podido vacunar más rápido un mes antes, o haber postergado las aperturas de febrero un mes después hubiera cambiado mucho la cantidad de fallecidos”.
“Lo que se observa, si se compara la cantidad de fallecidos por edades hasta febrero y después de febrero, es que en proporción hay muchos menos fallecidos mayores de 70 años”, dijo Aliaga, y aseguró que “El avance de la vacunación impidió 20 mil fallecidos, pero a su vez podríamos haber tenido 20 mil menos si hubiera ocurrido esto antes de que empezaran a subir los casos”.
Aliaga aseguró que “la segunda ola terminó siendo muchísimo peor que la primera por cantidad de casos, pero no fue proporcionalmente igual de mala que la primera, simplemente, por la vacunación”.
“Por haber tomado más medidas hubo menos casos y menos fallecidos, y ahora estamos con muchísima más movilidad y actividades que las que teníamos el año pasado, y eso se refleja en más contagios pero no en la misma proporción, por la vacunación”, dijo Aliaga.